lunes, 8 de noviembre de 2010

ESTE VIAJE DEL PAPA A ESPAÑA, HA MARCADO UN PUNTO DE INFLEXIÓN EN LA SOCIEDAD ESPAÑOLA Y EN LA IGLESIA ESPAÑOLA

El pasado viernes dije que la visita del Papa a nuestro país durante este fin de semana, podía marcar desde mi punto de vista, un antes y un después en la percepción social de la Iglesia católica en nuestro pais. Y creo, que esto ha sido así.

Este viaje papal, no solamente ha dejado una gran huella en la comunidad creyente de valor evangélico, si no que también ha dejado un empezar virulento sobre el aconfesionalismo del Estado.

Pues no tenemos nada más que ver los diarios informativos de la prensa escrita en papel e internet, así como la radio o televisión y todo parte del desgraciado y mal aconsejado comentario que su Santidad realizó en el avión que le llevaba a Santiago y que ya analize en el comentario de ayer.

Efectivamente, este comentario ha sido el punto de inflexión de lo que yo considero un antes y un después de la percepción social de la iglesia católica, van a tener los españoles, los creyente y no creyentes.

El cristianismo católico fue un elemento esencial en la configuración de nuestras identidades en lo personal y familiar y dentro la sociedad civil. Pero hoy ya no es así, y debemos de reconocerlo y acepatarlo, como lo han aceptado en toda Europa las demás Iglesias locales. Nuestras sociedades han avanzado hacia la autonomía de la moral y de la ciencia, la separación de poderes, el respeto a la conciencia y, en consecuencia, en la capacidad de construir la historia sin acudir a la religión. Pues, los bajísimos índices de cumplimiento religioso indican este cambio de signo, que creo que será irreversible. Y es en estas circunstancias donde los seguidores de Jesucrsito, tenemos que manifestar con nuestra fe el Dios de Jesús.

Al laicismo y anticlericalismo que vemos no solo ha contribuido la clase poítica y la sociedad en general, sino también el acomodamiento de los católicos que durante mucho tiempo hemos tenido la sartén por el mango, olvidandonos que el mago de la sartén también se podia calentar y quemarnos. Nosotros hemos sido muy pasivos en nuestra evangelización. Hemos vivido más una religiosidad, que una fe.

Lógicamente no porque el Papa denuncie el laicismo, va a exisitir un cambio en las conductas de las personas. El cambio vendrá, lentamente en la medida en que nosotros tengamos un verdadero seguimiento de Jesús y renovemos la Iglesia, a una Iglesia abierta y acogedora al género humano.

En cuanto al otro punto de inflexion, vino protagonizado por el Papa Benedicto XVI sucesor de Pedro en la Iglesia Católica, un gran teologo, un hombre espiritual, un lider religioso, un intelectual, que nos transmitió unos valores que nuestra sociedad necesita. Y que todos creyentes y no creyentes deberíamos haber escuchado.

En el discurso más teológico pronunciado en los últimos tiempos, el Papa propugnó que “Europa debe abrirse a Dios, salir a su encuentro sin miedo, trabajar con su gracia por aquella dignidad del hombre que habían descubierto las mejores tradiciones: además de la bíblica, también la de época clásica, medieval y moderna, de las que nacieron las grandes creaciones filosóficas, literarias y culturales de Europa”.
Y ha declamado “dejadme que proclame desde aquí la gloria del hombre, que advierta de las amenazas a su dignidad por el expolio de sus valores y riquezas originarios, por la marginación o la muerta infligidas a los mas débiles o pobres” en lo que parecía una referencia velada al aborto.
Sin recordar los abusos cometidos en nombre de ese Dios, Benedicto XVI ha dicho: “La Europa de la ciencia y de la tecnología, de la civilización y la cultura tiene que ser a la vez la Europa abierta a la trascendencia y la fraternidad con otros continentes, al Dios vivo y verdadero desde el hombre vivo y verdadero. Esto es lo que la Iglesia desea aportar a Europa: velar por Dios y velar por el hombre”.

Que estas palabras de Benedicto XVI, nos sirvan para comprender que a Dios solo lo podemos encontrar en el hombre y en sus circustancias. Dios se humanizó en Jesús, para que comprendieramos que con Jesús y con su estilo de vida solamente de esa manera podemos encontrar a Dios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario