martes, 31 de diciembre de 2013

EVANGELIO DEL 1 DE ENERO 2014. FESTIVIDAD DE SANTA MARÍA MADRE DE DIOS.

Evangelio según San Lucas 2, 16-21.

En aquel tiempo los pastores fueron corriendo y encontraron a María y a José y al niño acostado en el pesebre. Al verlo, les contaron lo que les habían dicho de aquel niño. Todos los que lo oían se admiraban de lo que decían los pastores. Y María conservaba todas estas cosas, meditándolas en su corazón. Los pastores se volvieron dando gloria y alabanza a Dios por lo que habían visto y oído; todo como les habían dicho. Al cumplirse los ocho día tocaba circuncidar al niño, y le pusieron por nombre Jesús, como lo había llamado el ángel antes de su concepción.

COMENTARIO.-

Hoy, en el primer día del año, la liturgia de la Iglesia celebra la fiesta de la madre de Jesús, en su advocación más excelsa: María es la “Madre de Dios”. Esta doctrina fue definida como dogma de fe por el Concilio de Efeso (430).

Los cristianos aceptamos, como contenido de nuestra fe, esta afirmación dogmática. El fundamento doctrinal de esta afirmación está en la enseñanza, en que si Cristo “es Dios al mismo tiempo que hombre”. Por tanto, al ser María madre del hombre Jesús, es igualmente madre de Dios. Así se expreso, en el s. V, la grandeza de María.

Todo arranca desde los primeros Concilios de la Iglesia desde Nicea (325) hasta Calcedonia (451), donde se destaco la grandeza y la condición divina de Jesucristo, olvidándose mucho de la ejemplaridad y la condición humana de Jesús.

Pues, lo mismo ha ocurrido con María. De ella, al igual que Jesús hemos exaltado más “lo divino” que lo “humano”. Esto nos ha dificultado para comprender lo que humanamente representó María para Jesús.

María una sencilla y humilde mujer de Nazaret, educó a Jesús, como todas las madres educan a sus hijos. El amor, la bondad, la humildad, la sencillez, la fortaleza y la libertad, el respeto de María fueron valores inculcados a Jesús. Si Jesús con estos valores nos reveló a Dios, qué gran mujer tuvo que ser María.

Por eso, para comprender bien a María, no debemos de fijarnos solamente en su aspecto divino, sino más en todo su aspecto humano. Posiblemente aquí encontremos mejor a María.

TENGAMOS A MARÍA COMO VERDADERO EJEMPLO DE CONSTRUIDORA DEL REINO DE DIOS.
Hoy también celebramos la Jornada Mundial por la Paz, fiesta, ésta última, que aunque originalmente es una iniciativa eclesiástica católica, ha alcanzado una notable aceptación en la sociedad, gozando ya de un cierto estatuto civil. Pueden leer el comentario de ayer.

FELIZ AÑO 2014 A TODOS.

lunes, 30 de diciembre de 2013

:"LA FRATERNIDAD, FUNDAMENTO Y CAMINO PARA LA PAZ”. 47 JORNADA MUNDIAL POR LA PAZ.

La verdad que, nos encontramos ante un fin de AÑO lleno de celebraciones, que no nos da tiempo a pensar en todo.

Comenzamos ayer con la fiesta de la familia, para continuar pasado mañana con el primer día del año 2014. Primer día del año civil, «¡Año Nuevo!», y la Jornada Mundial por la Paz, fiesta, ésta última, que aunque originalmente es una iniciativa eclesiástica católica, ha alcanzado una notable aceptación en la sociedad, gozando ya de un cierto estatuto civil. Litúrgicamente, también pasado mañana es la fiesta de «Santa María Madre de Dios»; también la «octava [los ocho días] de Navidad» y por tanto el recuerdo de «la circuncisión de Jesús», celebración judía que se celebraba al octavo día del nacimiento del niño, y en la que se le imponía el nombre.

Si ayer dedique mi reflexión a la familia, hoy será a la Jornada Mundial de la Paz, y mañana sobre la festividad litúrgica de la Solemnidad de María Madre de Dios.

El próximo domingo 1 de Enero, celebraremos las 47 Jornadas Mundial de la PAZ, bajo el lema:"LA FRATERNIDAD, FUNDAMENTO Y CAMINO PARA LA PAZ”, es el título elegido por el Papa Francisco en su primer Mensaje para la 47 Jornada Mundial de la Paz.

En este Mensaje, consta de diez puntos, incluidos un breve prólogo y una conclusión, intercalados por dos citas bíblicas:"¿Dónde está tu hermano?" (Gn 4,9); "Y todos ustedes son hermanos" (Mt 23,8), y seis frases con atributos de la fraternidad: "La fraternidad, fundamento y camino para la paz", "La fraternidad, premisa para vencer la pobreza"; "El redescubrimiento de la fraternidad en la economía"; "La fraternidad extingue la guerra";"La corrupción y el crimen organizado se oponen a la fraternidad"; "La fraternidad ayuda a proteger y a cultivar la naturaleza".

"La fraternidad es una dote que todo hombre y mujer lleva consigo en cuanto ser humano, hijo de un mismo Padre. Frente a los múltiples dramas que afectan a la familia de los pueblos —pobreza, hambre, subdesarrollo, conflictos bélicos, migraciones, contaminación, desigualdad, injusticia, crimen organizado, fundamentalismos —, la fraternidad es fundamento y camino para la paz", señala la Santa Sede en una nota.

El texto advierte que "la cultura del bienestar lleva a la pérdida del sentido de la responsabilidad y de la relación fraterna. Los demás, en lugar de ser nuestros ‘semejantes’, se convierten en antagonistas o enemigos, y frecuentemente son cosificados. No es extraño que los pobres sean considerados un ‘lastre’, un impedimento para el desarrollo".

"A lo sumo -denunció-, son objeto de una ayuda asistencialista o compasiva. No son vistos como hermanos, llamados a compartir los dones de la creación, los bienes del progreso y de la cultura, a participar en la misma mesa de la vida en plenitud, a ser protagonistas del desarrollo integral e inclusivo".

Por ello, "la fraternidad, don y tarea que viene de Dios Padre, nos convoca a ser solidarios contra la desigualdad y la pobreza que debilitan la vida social, a atender a cada persona, en especial de los más pequeños e indefensos, a amarlos como a uno mismo, con el mismo corazón de Jesucristo".

"En un mundo cada vez más interdependiente, no puede faltar el bien de la fraternidad, que vence la difusión de esa globalización de la indiferencia, a la cual se ha referido en repetidas ocasiones el Papa Francisco. La globalización de la indiferencia debe ser sustituida por una globalización de la fraternidad".

Finalmente, recuerda que "la fraternidad toca todos los aspectos de la vida, incluida la economía, las finanzas, la sociedad civil, la política, la investigación, el desarrollo, las instituciones públicas y culturales. El Papa Francisco, al inicio de su ministerio, con un Mensaje que está en continuidad con el de sus Predecesores, propone a todos el camino de la fraternidad, para dar un rostro más humano al mundo".

Ante estas palabras del Papa Francisco, recuerdo aquí que el pasaje evangelio de la multiplicación de los panes y los peces. Jesús no realizó la multiplicación de los panes y los peces de forma material. El milagro de Jesús fue crear un ambiente de Fraternidad y del Compartir entre todos.

Jesús en esta multiplicación de los panes y de los peces parte de lo que la gente tiene en el momento. El milagro no es tanto la multiplicación del alimento, sino lo que ocurre en el interior de sus oyentes: se sintieron interpelados por la palabra de Jesús y, dejando a un lado el egoísmo, cada cual colocó lo poco que aún le quedaba, y se maravillaron después de que vieron que el alimento se multiplicó y sobró. Comprendieron entonces que si el pueblo pasaba hambre y necesidad, no era tanto por la situación de pobreza, sino por el egoísmo de los hombres y mujeres que conformados con lo que tenían, no les importaba que los demás pasaran necesidad. El gesto de compartir marca profundamente la vida de las primeras comunidades que siguieron a Jesús. Compartir el pan se convierte en un gesto que prolonga y mantiene la vida, un gesto de pascua y de resurrección. Al partir el pan se descubre la presencia nueva del resucitado.


La Fraternidad y el Compartir son los primeros peldaños para construir el Reino de Dios.

sábado, 28 de diciembre de 2013

EVANGELIO DOMINGO 29 DE DICIEMBRE 2013. FIESTA DE LA SAGRADA FAMILIA.

Evangelio según San Mateo 2, 13-15.19-23.

Cuando se marcharon los magos, el ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo:" Levántate, toma al niño y a su madre y huye a Egipto; quédate allí hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo". José se levanto, cogió al niño y a su madre de noche; se fue a Egipto y se quedó hasta la muerte de Herodes; así se cumplió lo que dijo el Señor por el Profeta:"Llamé a mi Hijo para que saliera de Egipto". Cuando murió Herodes, el ángel del Señor se apareció en sueños a José en Egipto y le dijo: "Levántate, toma al niño y a su madre y vuélvete a Israel; ya han muerto los que atentaban contra la vida del niño". Se levantó, tomó al niño y a su madre y volvió a Israel. Pero al enterarse de que Arquelao reinaba en Judea como sucesor de su padre Herodes tuvo miedo de ir allá. Y avisado en sueños se retiró a Galilea y se estableció en un pueblo llamado Nazaret. Así se cumplió lo que dijeron los profetas, que se llamaría nazareno".

COMENTARIO.-

El domingo siguiente al día de Navidad, la Iglesia Católica celebra el día de la Sagrada Familia. Aprovecho hoy para hacer una reflexión sobre la familia cristiana.

Los grandes estudiosos del evangelio de Mateo, nos van confirmando que este relato no tiene una gran veracidad histórica. Por tanto, lo que interesa en este relato no es el acontecimiento histórico que narra, sino la enseñanza religiosa y social que plantea. Pero como este evangelio lo volveremos a leer en la fiesta de los santos inocentes pasado mañana, dejaremos esta reflexión para ese día.

La liturgia nos propone, para nuestra reflexión, de la Sagrada Familia a Jesús, María y José, como modelo de toda familia cristiana. Es pues una excelente ocasión para que a la luz; del Evangelio, cada familia, realicemos un sereno y sincero balance familiar.

Muchas veces, creemos que nuestra familia, no es modelo ni ejemplo de familia cristiana, pues en ella, las relaciones entre sus miembros no es la que nosotros quisiéramos que fuera, la desobediencia de nuestros hijos, el problema de su educación, el cuidado de nuestros mayores, etc.

Pero a menos que realicemos una breve lectura del Evangelio, podremos comprobar, que nuestra familia es igual que la de Jesús, María y José.

Porqué dejándonos de los tópicos de que en Jesús, María y José, todo es perfección, podemos comprobar cómo Jesús se quedó en Jerusalén, sin que lo supieran sus padres y le dijo su madre: “ Hijo, ¿ por qué nos has tratado así ¿ Mira que tu padre y yo te buscábamos angustiados “ Él les contestó: “ ¿ Por qué me buscabais?. En otros pasajes evangélicos encontramos: Dijo Jesús: “¿Pensáis que he venido a traer paz a la tierra? Os digo que paz no, sino espada. Porque, de ahora en adelante, una familia de cinco estará dividida: tres contra dos y dos contra tres; se dividirá padre contra hijo e hijo contra padre, madre contra hija e hija contra madre, la suegra contra la nuera y la nuera contra la suegra” (Lc 12, 51-53), “así que los enemigos del hombre serán los de su casa” (Mt 10,36 ). Otro pasaje nos dice: Una multitud de gente estaba sentada en torno a él. Le dijeron: Oye, tu madre y tus hermanos te buscan ahí fuera. Él les contestó: ¿Quiénes son mi madre y mis hermanos? Y, paseando la mirada por los que estaban sentados en corro a él añadió: Mirad a mi madre y a mis hermanos. Pues el que cumpla la voluntad de mi Padre del cielo, ése es hermano mío y hermana y madre”.

La presencia de Jesús entre nosotros; se hace realidad encarnada en una familia: que quiso correr nuestra misma suerte.

Que quiero decir con todo lo anterior, que la familia debe cimentarse en la comunicación emocional, el respeto, la transparencia, la libertad; orientadas hacia el ideal de unas relaciones de fe y de comunión, en la tolerancia y el amor. Valores de humanidad que José y María inculcaron en Jesús .Y este es el modelo de familia cristiana que debemos promover, y no de imponer; pues no debemos de olvidar de que es la Iglesia la que está en el mundo y no el mundo en la Iglesia.

Lo que si debemos los cristianos de ser consciente es que hoy como ayer la familia se constituye en el centro de la sociedad y a donde convergen todas las miradas y esperanzas. Pues es, en su seno donde se forjan los corazones y se robustecen los valores de las futuras personas que han de conducir los destinos de la nueva civilización. Ya que la familia cristiana católica, como dice su catolicismo debe de ser universal.

DIFUNDID EL EVANGELIO.PÁSALO.


martes, 24 de diciembre de 2013

EVANGELIO DEL DÍA DE NAVIDAD. 25 DE DICIEMBRE.

Evangelio según San Juan 1, 1-18.

“En el principio ya existía la Palabra, y la Palabra estaba junto a Dios, y la Palabra era Dios. La Palabra en el principio estaba junto a Dios. Por medio de la Palabra se hizo todo, y sin ella no se hizo nada de lo que se ha hecho. En la palabra había vida, y la vida era la luz de los hombres. La luz brilla en las tiniebla, y la tiniebla no la recibió. Surgió un hombre enviado por Dios, que se llamaba Juan: éste venía como testigo, para dar testimonio de la luz, para que por él todos vinieran a la fe. No era él la luz, sino testigo de la luz. La palabra era luz verdadera, que alumbraba a todo hombre. Al mundo vino y en el mundo estaba; el mundo hizo por medio de ella, y el mundo no la conoció. Vino a su casa, y los suyos no la recibieron. Pero a cuantos la recibieron, les da poder para ser hijos de Dios, si creen en su nombre. Estos no han nacido de sangre, ni de amor carnal, ni de amor humano, sino de dios. Y la Palabra se hizo carne, y acampó entre nosotros, y hemos contemplado su gloria: gloria propia del hijo único del Padre, lleno de gracia y de verdad. Juan da testimonio de él y grita diciendo: " Éste es de quien dije: el que viene detrás de mí, porque existía antes que yo". Pues de su plenitud todos hemos recibido gracia tras gracia: porque la ley se dio por medio de Moisés, la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo. A Dios nadie lo ha visto jamás: el Hijo único, que está en el seno del Padre, es quien lo ha dado a conocer”.

COMENTARIO.-

Cuatro ideas centrales:

- "La Palabra era Dios". Una "palabra" es signo que "comunica" una idea, un conocimiento. El Dios, que se muestra al mundo con el nacimiento de Jesús, es "comunicación" y "donación" de la realidad misma de Dios (Castillo).
Dios se cambia, de la grandeza de los cielos, a la bajeza de nacer en un pesebre.

- "Y la Palabra se hizo carne y acampó entre nosotros". La encarnación de Dios en Jesús significa que Dios se despoja de todo su poder y autoridad. Dios se humanizo en Jesús, se hizo hombre despojándose de poderes y dignidades. Por lo tanto, la Palabra, es futuro y esperanza, no en el poder, sino en la dignificación de lo humano.

- "A Dios nadie lo ha visto jamás". Dios está fuera de nuestro conocimiento. lo que nosotros podemos conocer de Dios es lo que se nos ha revelado en Jesús, en ese niño que nació despojado de todo. La grandeza de Dios está en la grandeza de este niño, que no tiene otra grandeza que la de ser humano.

- "Vino a su propia casa, pero los suyos no lo recibieron”. Es la otra parte que no podemos ignorar cuando contemplamos el misterio de la encarnación. Con todos los siglos de preparación para su venida, el hijo de Dios sufrió el rechazo.

El aspecto histórico de Jesús, no lo podemos pasar por alto tan fácilmente. La dimensión humana de Jesús arranca, entonces, con lo que celebramos hoy, y se va extendiendo hasta la cruz. Ese es el camino que recorreremos también con él durante este año litúrgico que habíamos inaugurado con el adviento. 

DIFUNDID EL EVANGELIO.PÁSALO.


FELIZ NAVIDAD A TODOS

Celebramos el nacimiento de Cristo, en la historia de la humanidad. Que en esta navidad, descubramos no solamente la divinidad de Cristo, sino también en Cristo la HUMANIZACIÓN DE DIOS. 


Que este nacimiento, os llene de PAZ, AMOR Y BIEN a ti y a todos los tuyos.

lunes, 23 de diciembre de 2013

EVANGELIO DE LA MISA DE MEDIANOCHE DEL DÍA DE NAVIDAD.

Evangelio según San Lucas 2, 1-14

En aquel tiempo salió un decreto del emperador Augusto, ordenando hacer un censo del mundo entero. Este fue el primer censo que se hizo siendo Cirino gobernador de Siria. Y todos iban a inscribirse, cada cual a su ciudad. También José, que era de la casa y familia de David, subió desde la ciudad de Nazaret en Galilea a la ciudad de David, que se llama Belén, para inscribirse con su esposa María, que estaba encinta. Y mientras estaban allí le llegó el tiempo del parto y dio a luz a su hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no tenían sitio en la posada. En aquella región había unos pastores que pasaban la noche al aire libre, velando por turno su rebaño. Y un ángel del Señor se le presentó, la gloria del Señor los envolvió de claridad y se llenaron de gran temor. El ángel les dijo: " No temáis, os traigo la buena noticia, la gran alegría para todo el pueblo: hoy, en la ciudad de David, os ha nacido un Salvador: el Mesías, el Señor. Y aquí tenéis la señal: encontraréis un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre". De pronto, en torno al ángel, apareció una legión del ejército celestial, que alababan a Dios, diciendo: " Gloria a Dios en el cielo y en la tierra paz a los hombres que Dios ama ".

COMENTARIO.-

Como ya dejamos claro en el comentario del pasado lunes, no podemos afirmar que Jesús naciera en Belén, según los últimos estudios. Lo más probable es que todos estos hechos, se utilizarán para justificar que Jesús nació en la ciudad del rey David ( Belén ).

Pero lo que interesa, en este relato, no son los datos históricos, sino el mensaje religioso.

El tema de los pastores suele ser utilizado por los cristianos católicos para ponderar lo mucho que Dios ama la pobreza y lo importante que es la pobreza. Lo cual es una solemne tontería. Porque la pobreza es una cosa horrible, es mala, es causa de indecibles sufrimientos, es humillante y es la expresión más dolorosa de las desigualdades que ensucian y pudren la convivencia social.
Dios no quiere que haya pobreza. Ni puede querer que existan los pobres. Lo que Dios quiere es que todos los humanos seamos "iguales" en dignidad y derechos. Y, puesto que somos "diferentes" (unos más listos que otros, o más trabajadores que otros, o más honrados que otros...), es inevitable que se produzcan "desigualdades" sociales, culturales, económicas. Esto supuesto, el mensaje del Evangelio, al decir que los pastores fueron los primeros invitados para acercarse a Jesús, lo que nos viene a decir es que, puesto que las "diferencias" provocan tantas "desigualdades", Jesús considera que los primeros para él son los que están más abajo en la escala de las "diferencias". 

Próximamente veremos también como a Jesús lo visitarán también el otro extremo los reyes de oriente.

Jesús entra en la historia de la humanidad, para enseñarnos que Dios no es excluyente, sino amante del género humano. Porque Dios, en Jesús, se humanizó, se fundió en lo humano.


DIFUNDID EL EVANGELIO. PÁSALO.

sábado, 21 de diciembre de 2013

EVANGELIO DOMINGO 22 DE DICIEMBRE 2013. CUARTO DOMINGO DE ADVIENTO

Evangelio según San Mateo 1, 18-24

El nacimiento de Jesucristo fue de esta manera: la madre de Jesús estaba desposada con José, y antes de vivir juntos resultó que ella esperaba un hijo, por obra del Espíritu Santo. José, su esposo, que era bueno y no quería denunciarla, decidió repudiarla en secreto. Pero apenas había tomado esta resolución se le apareció en sueños un ángel del Señor, que le dijo: " José, hijo de David, no tengas reparo en llevarte a María, tu mujer, porque la criatura que hay en ella viene del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de los pecados”. Todo esto sucedió para que se cumpliese lo que había dicho el Señor por el profeta: " Mirad, la virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel (que significa " DIOS-CON-NOSOTROS “). Cuando José se despertó hizo lo que le había mandado el ángel del Señor y se llevó a casa a su mujer”.

COMENTARIO.-

El evangelio de Mateo empieza presentando la genealogía de Jesús, para continuar con el texto evangelio de este domingo donde se nos narra el nacimiento de Jesús.

Los estudiosos de los evangelios, que han analizado detenidamente este relato, están generalmente de acuerdo en que no tenemos garantías históricas de que lo que aquí se cuenta sucedería realmente así. Primero, porque sólo el mismo José pudo ser quien relatase lo que le sucedió. Pero no hay trazas de semejante cosa, ya que los vecinos del pueblo tenían a Jesús por uno más (Mc 6, 1-6), incluso su familia pensaba de él que estaba loco (Mc 3, 21). Además, si es que efectivamente José pensaba que María estaba encienta, tenía que haberla denunciado, precisamente porque eso es lo que, en aquella religión, tenía que hacer un hombre “justo” (Deut 22, 23-27).

Entonces, ¿qué quiere enseñar este relato? La enseñanza religiosa, que aquí se pretende transmitir, es que Jesús no fue un hombre cualquier, sino un hombre enteramente singular, único, que vino a este mundo por la intervención del Espíritu de Dios. Y que, por tanto, era Hijo de Dios, título que en las culturas del S.I se daba a quienes llevaban a cabo una misión extraordinaria.

Por lo que dice el texto de este evangelio, la misión de Jesús fue la “salvación de los pecados”. Se puede discutir la idea que se tenía entonces sobre el pecado. En todo caso, hablar de “pecado” es hablar de “maldad”, que daña, que causa sufrimiento, que ofende. La tarea de Jesús es, por tanto, remediar tanta maldad y tanto dolor, tanta ofensa y tanta desgracia, como a diario vemos que nos causamos unos a otros. Pero, más importante que esto, es lo que el texto dice al final: Jesús es el “Emmanuel”, que significa “Dios con nosotros”. En Jesús, Dios se nos hace presente. Más aún, en Jesús, Dios se funde con nosotros. Y está en cada ser humano. Se comprende, pues, la extraordinaria singularidad de Jesús en la historia de la humanidad.

DIFUNDID EL EVANGELIO. PÁSALO.

Mañana lunes pondré el evangelio de la misa de medianoche comienzo del día de navidad y el martes el evangelio del día de navidad.

viernes, 20 de diciembre de 2013

NOCIONES PARA COMPRENDER EL NACIMIENTO DE JESÚS

Tanto el evangelio de Mateo como el de Lucas ofrecen en sus dos primeros capítulos un conjunto de relatos en torno a la concepción, nacimiento e infancia de Jesús. Son conocidos tradicionalmente como " evangelios de la infancia ". Ambos ofrecen notables diferencias entre sí en cuanto al contenido, estructura general, redacción literaria y centros de interés. El análisis de los procedimientos literarios utilizados muestra que más que relatos de carácter biográfico son composiciones cristianas elaboradas a la luz de la fe en Cristo resucitado. No fueron redactados para informar sobre los hechos ocurridos ( probablamente se sabía poco ), sino para proclamar la Buena Noticia de que Jesús es el mesías davídico esperado en Israel y el Hijo de Dios nacido para salvar a la humanidad. Así piensan especialistas como Holzmann, Benoit, Vögtle, Trilling, Rigaux, Laurentin, Muñoz Iglesias O Brown. De ahí que la mayoría de los investigadores sobre Jesús comiencen su estudio a partir del bautismo en el Jordán.

Jesús nació probablemente en Nazaret. Solo en los evangelios de Mateo y Lucas se nos habla de su nacimiento en Belén; lo hacen seguramente por razones teológicas, como cumplimiento de las palabras de Miqueas, profeta del siglo VIII a. C., que dice así: " Y tú, Belén, tierra de Judá, no eres ni mucho menos la última de las ciudades de Judá, pues de ti saldrá un jefe que será pastor de mi pueblo, Israel " ( Miqueas 5,1 ). Por lo demás, todas las fuentes dicen que proviene de Nazaret ( Marcos 1,9; Mateo 21,11; Juan 1, 45-46; Hechos 10,38 ) y que era llamado " Jesús, el Nazareno " o " de Nazaret " ( Marcos 1,24; 10,47; 14,67; 16,6; Lucas 4,34; 24,19 ).

Lo que pasa es que, cuando llegan estas fiestas, se suele hablar del " belén". Y, por tanto, de los "pastores" de Belén. Por el evangelio de Lucas sabemos que, cuando nació Jesús, un ángel del cielo se apareció a unos pastores, "que pasaban la noche al raso velando el rebaño". Y fueron aquellos modestos trabajadores los primeros invitados para ir al encuentro de Jesús (Lc 2, 8-12).


El tema de los pastores suele ser utilizado por los predicadores cristianos para ponderar lo mucho que Dios ama la pobreza y lo importante que es la pobreza. Lo cual es una solemne tontería. Porque la pobreza es una cosa horrible, es mala, es causa de indecibles sufrimientos, es humillante y es la expresión más dolorosa de las desigualdades que ensucian y pudren la convivencia social. Dios no quiere que haya pobreza. Ni puede querer que existan los pobres. Lo que Dios quiere es que todos los humanos seamos "iguales" en dignidad y derechos. Y, puesto que somos "diferentes" (unos más listos que otros, o más trabajadores que otros, o más honrados que otros...), es inevitable que se produzcan "desigualdades" sociales, culturales, económicas. Esto supuesto, el mensaje del Evangelio, al decir que los pastores fueron los primeros invitados para acercarse a Jesús, lo que nos viene a decir es que, puesto que las "diferencias" provocan tantas "desigualdades", Jesús considera que los primeros para él son los que están más abajo en la escala de las "diferencias". Para ir así acortando las "desigualdades". Las "desigualdades" no se acaban por decreto. Las "desigualdades" se van aminorando en la medida en que, quienes pueden hacerlo, se ponen de parte de los que están los últimos, en cuanto se refiere a las "diferencias" económicas, sociales, culturales, sanitarias y así sucesivamente. Por eso, sin duda, Jesús dijo, tantas veces, que los primeros se pongan los últimos. Para que los últimos vayan teniendo, también ellos, lo que tienen los primeros. Porque sólo así, mediante hechos patentes, los derechos de los últimos se convertirán en realidades tangibles.


Como es lógico, los que, por el motivo que sea, estamos bien situados en cuanto se refiere a las "diferencias", nos resistimos con uñas y dientes a que el "orden" establecido, a base de "desigualdades", se convierta en " desorden". El "desorden" necesario para acabar con las "desigualdades". Y es que el problema y las resistencias para que eso suceda, no provienen sólo del egoísmo, el orgullo, la ambición, etc. No se trata sólo de un problema moral. Ese problema moral existe, no cabe duda. Pero tal problema se sostiene y se justifica por argumentos y razones que nos hemos buscado los afortunados de arriba. Para seguir arriba. Y seguir donde estamos con buena conciencia.


Como es bien sabido, los mejores educadores de la "mentalidad burguesa" fueron los predicadores del s. XVIII en Francia. Concretamente, los grandes educadores de la burguesía, en aquel tiempo, fueron los oradores sagrados. Así lo demostró ampliamente el excelente y enorme estudio de Bermhard Groethuysen, La formación de la conciencia burguesa en Francia durante el siglo XVIII, publicado en alemán en 1927, y editado en castellano en 1943 (Fondo de Cultura Económica). La idea de aquellos predicadores es que la "virtud" y el "orden" son la misma cosa. Es decir, para que haya virtud tiene que haber orden, decía el jesuita Crasset. De ahí que, para Bourdaloue, lo que ante todo interesa mantener a toda costa es el orden social. De donde este predicador, entre otros muchos, sacaba la conclusión: "Fue necesario que hubiera diversas clases y, ante todo, fue inevitable que hubiera pobres, a fin de que existieran en la sociedad humana obediencia y orden" (o. c., p. 285). Porque, según esta forma de pensar, si todos en la sociedad quisieran ser iguales, "¡qué trastorno no se experimentaría en el mundo, qué no vendría a ser la sociedad humana!" (o. c., p. 282). Por lo demás, fue inevitable que estas ideas pasaran a España, con retraso pero con fuerza. Y así, el s. XIX, predicadores como Fray Diego José de Cádiz, sembraron con estos discursos la semilla de la seguridad en las clases pudientes, que se sintieron justificadas y tranquilizadas en sus conciencias por los clérigos que les decían que Dios quiere a los ricos y a los pobres, pero a cada uno en su sitio, para que no se perturbe el "orden" querido por el mismo Dios.


Así las cosas, ¿nos va a extrañar que estemos viviendo lo que estamos viviendo? En consecuencia, ¿no es verdad que los pastores de Belén tienen hoy más actualidad que la noche aquélla en la que el ángel los llamó por primera vez a ser los primeros en acercarse a Jesús? Por eso, mi pregunta angustiosa es ésta: ¡Dios mío! ¿qué hemos hecho con el Evangelio? Y sobre todo, ¿qué hemos hecho con la dignidad de los seres humanos?


Aproximación histórica de Jesús. José Antonio Pagola

Teología popular. José María Castillo.

sábado, 14 de diciembre de 2013

EVANGELIO DOMINGO 15 DE DICIEMBRE 2013. TERCERO DE ADVIENTO

Evangelio según San Mateo 11, 2-11.

En aquel tiempo, Juan, que había oído en la cárcel las obras de Cristo, le mandó a preguntar por medio de dos de sus discípulos: “¿Eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro?”. Jesús les respondió: “. Id a anunciar a Juan lo que estáis viendo y oyendo: los ciegos ven y los inválidos andan, los leprosos quedan limpios y los sordos oyen, los muertos resucitan, y a los pobres se les anuncia la Buena Noticia. ¡ Y dichoso el que no se sienta defraudado por mí”. Al irse ellos, Jesús se puso a hablar a la gente sobre Juan: “¿Qué salisteis a contemplar en el desierto, una caña sacudida por el viento? ¿O qué fuisteis a ver, un hombre vestido con lujo? Los que visten con lujo habitan en los palacios. Entonces, ¿a qué salisteis, a ver a un profeta?. Sí, os digo, y más que un profeta: él es de quien está escrito: “Yo envió mi mensajero delante de ti para que prepare el camino ante ti”. Os aseguro que no ha nacido de mujer uno más grande que Juan Bautista, aunque el más pequeño en el Reino de los Cielos es más grande que él”.

COMENTARIO.-

El tercer domingo de adviento, llamado “Gaudete”, es decir, Gozo, se utiliza el color rosado, indicando la alegría al acercarse ya el nacimiento del Señor. (Cf. Flp. 4, 4-5), usado como antífona propia de ese día: "Estad alegres en el señor; os lo repito, estad alegres. Que vuestra mesura la conozca todo el mundo.

El Evangelio de este domingo, comienza recordándonos que Juan había oído hablar de Cristo, por sus obras y no por sus palabras. Por eso, Juan envía a dos discípulos a preguntar a Jesús si él era el que tenía que venir arreglar este mundo; o había que esperar a otro. Jesús contestó mostrando que lo que él hacía era curar enfermos, aliviar penas y sufrimientos y especialmente anunciar la Buena Noticia a los pobres.

Indiscutiblemente Jesús nos deja muy claro, que la solución no está en los discursos, los argumentos, las teorías, los dogmas, las celebraciones religiosas, ni las manifestaciones ostentosas de la religiosidad popular. Si no que la Buena Noticia esta en lo humano, en lo muy humano, como poner buena cara en ciertos momentos, una sonrisa de acogida, unos brazos abierto a la esperanza, un silencio oportuno, una mirada de apoyo, una visita a un enfermo, a una persona sola, una conversación de escucha, una escucha sin prisa, un acompañamiento sin palabras, una ayuda en el trabajo, una ayuda en buscar un trabajo, en definitiva en transmitir felicidad. Hacer y no hablar.

La Navidad, es tiempo de gran solidaridad con los más necesitados. Todos nos volcamos en estas fechas, organizamos eventos para recaudar dinero, para comprar juguetes, comidas y ropas, para todos los que buscan una ayuda. Quizás este año, de una gran crisis económica, nuestra solidaridad sea mayor. 

Pero, mirando los efectos negativos que está dejando la crisis económica en millones de personas, creo que debemos hacernos un interrogante más profundo: ¿Cómo me afecta esta crisis? ¿Qué puedo y debo hacer?

Interrógate que debemos hacernos hoy quienes creemos en la dignidad de todo ser humano. Porque la solidaridad es necesaria, pero más necesario es el compromiso social del cristiano católico en la lucha por unos valores más justo, con una participación más activa en la vida social y política. De esta manera, es cómo podemos producir un cambio en las estructuras sociales.

Que esta navidad nos lleve no solamente a unos días de solidaridad, si no a un compromiso social.

Jesús termina diciendo a los mensajeros de Juan. “Dichoso el que no se escandalice de mí “. Que quiere decir, que Dios está en nuestra felicidad y en la felicidad de los demás. No en el sufrimiento y en el dolor, que nosotros provocamos a veces con nuestros discursos religiosos.

En la corona de adviento encenderemos la tercera vela que corresponderá a la tolerancia, practiquemos durante esta semana está virtud. Posiblemente hagamos más felices a los demás.


DIFUNDID EL EVANGELIO. PASALO.

viernes, 13 de diciembre de 2013

DE UNA NAVIDAD SOLIDARIA A UNA NAVIDAD COMPROMETIDA

La Navidad, es tiempo de gran solidaridad con los más necesitados. Todos nos volcamos en estas fechas, organizamos eventos para recaudar dinero, para comprar juguetes, comidas y ropas, para todos los que buscan una ayuda. Quizás este año, de una gran crisis económica, nuestra solidaridad sea mayor. 

Pero, mirando los efectos negativos que está dejando la crisis económica en millones de personas, creo que debemos hacernos un interrogante más profundo: ¿Cómo me afecta esta crisis? ¿Qué puedo y debo hacer?

Es necesario redescubrir el verdadero significado de la libertad y de la justicia, en una sociedad eficiente en la que existe quien quiere pisotear los derechos de los más débiles: los niños por nacer, los pobres, los ancianos, los enfermos. Es esto, en síntesis, lo que afirmó el Papa Francisco a una delegación del Instituto Dignitatis Humanae.

"El hombre es creado a imagen y semejanza de Dios" y por tanto posee "una dignidad originaria ... que no se puede suprimir, indisponible a cualquier poder o ideología". El Obispo de Roma partió de esta "verdad fundamental" para subrayar que "lamentablemente en nuestra época, rica de tantas conquistas y esperanzas, no faltan poderes y fuerzas que terminan por producir una cultura del descarte, que tiende a convertirse en mentalidad común":

"Las víctimas de esa cultura son precisamente los seres humanos más débiles y frágiles - los niños por nacer, los más pobres, los viejos enfermos, los inválidos graves... -, que corren el riesgo de ser ‘descartados', expulsados por un engranaje que debe ser eficiente a todo precio. Este falso modelo de hombre y de sociedad actúa un ateísmo práctico negando de hecho la Palabra de Dios que dice: "hagamos el hombre a nuestra imagen, según nuestra semejanza" (cfr Gen 1,26)".

En cambio -continuó el Santo Padre- si dejamos que la Palabra de Dios "ponga en discusión nuestras formas de pensar y de actuar, los criterios, las prioridades y las elecciones, entonces las cosas pueden cambiar"; "La fuerza de esta Palabra pone límites a quien quiera volverse hegemónico prevaricando los derechos y la dignidad de los otros. Al mismo tiempo, dona esperanza y consolación a quien no es capaz de defenderse, a quien no dispone de medios intelectuales y prácticos para afirmar el valor del propio sufrimiento, de los propios derechos, de la propia vida".

En la Doctrina social de la Iglesia -subrayó el Pontífice- "hay un fruto particularmente significativo del largo camino del Pueblo de Dios en la historia moderna y contemporánea: la defensa de la libertad religiosa, de la vida en todas sus fases, del derecho al trabajo y al trabajo decente, de la familia, de la educación". "Son bienvenidas", por tanto, todas las iniciativas que "pretenden ayudar a las personas, a las comunidades y a las instituciones a redescubrir la portada ética y social del principio de la dignidad humana, raíz de libertad y de justicia:

"Con tal fin es necesaria una obra de sensibilización y de formación, para que los fieles laicos, en cualquier condición, y especialmente aquellos que se comprometen en el campo político, sepan pensar según el Evangelio y la Doctrina social de la Iglesia y actuar coherentemente, dialogando y colaborando con cuantos, con sinceridad y honestidad intelectual, comparten, sino la fe, al menos una visión similar de hombre y de sociedad y sus consecuencias éticas. No son pocos los no cristianos y los no creyentes convencidos que la persona humana deba ser siempre un fin y jamás un medio".


Por eso digo yo, que debemos de hacer hoy quienes creemos en la dignidad de todo ser humano. Porque la solidaridad es necesaria, pero más necesario es el compromiso social del cristiano católico en la lucha por unos valores más justo, con una participación más activa en la vida social y política. De esta manera, es cómo podemos producir un cambio en las estructuras sociales.

Que esta navidad nos lleve no solamente a unos días de solidaridad, si no a un compromiso social.




jueves, 12 de diciembre de 2013

EVANGELII GAUDIUM. LA ALEGRÍA DEL EVANGELIO.

La reciente Exhortación del papa Francisco sobre la evangelización: “Evangelii Gaudium”, creo que nada más por su título queda totalmente resumida. Pues no es fácil decir más con dos palabras “La Alegría del Evangelio”.

Creo que era necesario escuchar estas palabras, especialmente en este conteniente viejo de Europa, donde con el paso del tiempo, no hemos dedicado más a vivir nuestras normas eclesiásticas que la Alegría del Evangelio.

Es curioso, no dice que no pueda haber alegría sin Evangelio, sino que no puede haber Evangelio sin alegría. No dice que quien cree en el Evangelio no vaya a conocer la tristeza, sino que quien anuncia el Evangelio ha de procurar aliviar la tristeza en sí mismo y en los demás. No dice que baste sentirse contento sin luchar contra todo lo injusto, sino que a toda lucha sin alegría le falta corazón.

Evangelii gaudium. Dos palabras bastan, o incluso solo una: “Evangelio”, pues Evangelio significa eso, “buena noticia” o simplemente alegría.

Nos acercamos a la Navidad y a esos pastores que representan a la gente sencilla y humilde de este mundo se les anuncio “No temáis, os anuncio una gran alegría que lo será para todo el pueblo” (Lc 2,10). El Papa Francisco nos habla con la alegría que todos estamos esperando, pero especialmente con la alegría del Evangelio.


¿Qué es un cristiano sin el Evangelio?

miércoles, 11 de diciembre de 2013

EL PAPA: “LOS CATÓLICOS EN POLÍTICA DEBEN DE SER COHERENTES CON EL EVANGELIO”.‏

Es necesario redescubrir el verdadero significado de la libertad y de la justicia, en una sociedad eficiente en la que existe quien quiere pisotear los derechos de los más débiles: los niños por nacer, los pobres, los ancianos, los enfermos. Es esto, en síntesis, lo que afirmó el Papa Francisco a una delegación del Instituto Dignitatis Humanae.

"El hombre es creado a imagen y semejanza de Dios" y por tanto posee "una dignidad originaria ... que no se puede suprimir, indisponible a cualquier poder o ideología". El Obispo de Roma partió de esta "verdad fundamental" para subrayar que "lamentablemente en nuestra época, rica de tantas conquistas y esperanzas, no faltan poderes y fuerzas que terminan por producir una cultura del descarte, que tiende a convertirse en mentalidad común":

"Las víctimas de esa cultura son precisamente los seres humanos más débiles y frágiles - los niños por nacer, los más pobres, los viejos enfermos, los inválidos graves... -, que corren el riesgo de ser ‘descartados', expulsados por un engranaje que debe ser eficiente a todo precio. Este falso modelo de hombre y de sociedad actúa un ateísmo práctico negando de hecho la Palabra de Dios que dice: "hagamos el hombre a nuestra imagen, según nuestra semejanza" (cfr Gen 1,26)".

En cambio -continuó el Santo Padre- si dejamos que la Palabra de Dios "ponga en discusión nuestras formas de pensar y de actuar, los criterios, las prioridades y las elecciones, entonces las cosas pueden cambiar":
"La fuerza de esta Palabra pone límites a quien quiera volverse hegemónico prevaricando los derechos y la dignidad de los otros. Al mismo tiempo, dona esperanza y consolación a quien no es capaz de defenderse, a quien no dispone de medios intelectuales y prácticos para afirmar el valor del propio sufrimiento, de los propios derechos, de la propia vida".

En la Doctrina social de la Iglesia -subrayó el Pontífice- "hay un fruto particularmente significativo del largo camino del Pueblo de Dios en la historia moderna y contemporánea: la defensa de la libertad religiosa, de la vida en todas sus fases, del derecho al trabajo y al trabajo decente, de la familia, de la educación". "Son bienvenidas", por tanto, todas las iniciativas que "pretenden ayudar a las personas, a las comunidades y a las instituciones a redescubrir la portada ética y social del principio de la dignidad humana, raíz de libertad y de justicia:

"Con tal fin es necesaria una obra de sensibilización y de formación, para que los fieles laicos, en cualquier condición, y especialmente aquellos que se comprometen en el campo político, sepan pensar según el Evangelio y la Doctrina social de la Iglesia y actuar coherentemente, dialogando y colaborando con cuantos, con sinceridad y honestidad intelectual, comparten, sino la fe, al menos una visión similar de hombre y de sociedad y sus consecuencias éticas. No son pocos los no cristianos y los no creyentes convencidos que la persona humana deba ser siempre un fin y jamás un medio".

Tomado de RD


lunes, 9 de diciembre de 2013

A LA MEMORIA DE NELSON MANDELA

Aunque no ha sido un referente propiamente religioso si lo será siempre un referente moral de primer orden en el mundo.

 Propugnó la lucha por la igualdad y la libertad en Sudáfrica y no quiso que su victoria tras largos años de humillación y cárcel diera lugar a la venganza.

Quizás su imagen más significativa sea la que nos ofreció en un partido de rugby en el que Sudáfrica presentaba una alineación casi exclusiva de jugadores de raza blanca. En esa ocasión decidió animar y provocar el apoyo de negros y blancos al equipo que representaba el país. Fue una forma de eliminar recelos y rencores y fomentar la unión de todos los ciudadanos que antes habían estado enfrentados.

No había que olvidar el pasado injusto pero la solución no era invertir los papeles y poner  como opresores a los que antes habían sido oprimidos. No había que dar carpetazo a la injusticia pero sí buscar lo que unía y podía ayudar a todos a sentirse conciudadanos que buscan el bien común acabando con antiguas injusticias y divisiones.


Es inevitable pensar ¡qué gran ejemplo para nosotros que volvemos a estar empeñados en refrescar viejas heridas que estaban ya casi cicatrizadas!

domingo, 8 de diciembre de 2013

SOLEMNIDAD DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN DE MARÍA.

Virgen y Madre María,
tú que, movida por el Espíritu,
acogiste al Verbo de la vida
en la profundidad de tu humilde fe,
totalmente entregada al Eterno,
ayúdanos a decir nuestro « sí »
ante la urgencia, más imperiosa que nunca,
de hacer resonar la Buena Noticia de Jesús.
Tú, llena de la presencia de Cristo,
llevaste la alegría a Juan el Bautista,
haciéndolo exultar en el seno de su madre.
Tú, estremecida de gozo,
cantaste las maravillas del Señor.
Tú, que estuviste plantada ante la cruz
con una fe inquebrantable
y recibiste el alegre consuelo de la resurrección,
recogiste a los discípulos en la espera del Espíritu
para que naciera la Iglesia evangelizadora.
Consíguenos ahora un nuevo ardor de resucitados
para llevar a todos el Evangelio de la vida
que vence a la muerte.
Danos la santa audacia de buscar nuevos caminos
para que llegue a todos
el don de la belleza que no se apaga.
Tú, Virgen de la escucha y la contemplación,
madre del amor, esposa de las bodas eternas,
intercede por la Iglesia, de la cual eres el icono purísimo,
para que ella nunca se encierre ni se detenga
en su pasión por instaurar el Reino.
Estrella de la nueva evangelización,
ayúdanos a resplandecer en el testimonio de la comunión,
del servicio, de la fe ardiente y generosa,
de la justicia y el amor a los pobres,
para que la alegría del Evangelio
llegue hasta los confines de la tierra
y ninguna periferia se prive de su luz.
Madre del Evangelio viviente,
manantial de alegría para los pequeños,
ruega por nosotros.

Amén. Aleluya.

(Oración final de la Exhortación  Evangelii Gaudium del Papa Francisco)


sábado, 7 de diciembre de 2013

EVANGELIO DOMINGO 8 DE DICIEMBRE DE 2013. SOLEMNIDAD DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN DE MARÍA.

Este segundo domingo de adviento, coincide con la solemnidad de la Inmaculada Concepción de María. De aquí que el Evangelio que vamos a comentar es el propio de la liturgia de la solemnidad. 


Lectura del santo evangelio según san Lucas 1, 26-38.

En aquel tiempo, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la estirpe de David; la virgen se llamaba María,
El ángel, entrando en su presencia, dijo:
-«Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.»
Ella se turbó ante estas palabras y se preguntaba qué saludo e aquél.
El ángel le dijo:
-«No temas, María, porque has encontrado gracia ante Dios, Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. Será grande, se llamará Hijo del Altísimo, el Señor Dios le dará el trono de David, su padre, reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin.»
Y María dijo al ángel:
-«¿Cómo será eso, pues no conozco a varón?»
El ángel le contestó:
-«El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el Santo que va a nacer se llamará Hijo de Dios.
Ahí tienes a tu pariente Isabel, que, a pesar de su vejez, ha concebido un hijo, y ya está de seis meses la que llamaban estéril, porque para Dios nada hay imposible.»
María contestó:

-«Aquí está la esclava del Señor; hágase en mi según tu palabra. » Y la dejó el ángel.


COMENTARIO.-


No es gran cosa lo que los Evangelios nos dicen de María de Nazaret, pero sí lo suficiente para tenerla en gran valor y aprecio. Desde luego esta fiesta de María no tiene nada que ver con la sexualidad, ni con la virginidad, ni que fuera concebida sin pecado original. Los Evangelios nada dicen de esto, que esto fueron elucubraciones teológicas muy posteriores y sin fundamento científico (Faustino Vilabrille).

La fiesta de la Inmaculada Concepción nos recuerda uno de los dogmas que la Iglesia nos enseña sobre María, la Madre de Jesús. Este dogma fue definido por el Papa Pío IX, el 8 de Diciembre de 1854.

El verdadero valor de María va por otro camino. La ejemplaridad de María, que celebramos en esta fiesta, es motivo de piedad, devoción y, sobre todo, de conducta ética en una vida generosidad y amor.

El Magníficat (magnificat en latín) es un canto y una oración cristiana. Proviene del evangelio de Lucas Lucas 1:46-55 y reproduce las palabras que, según este evangelista, María, Madre de Jesús, dirige a Dios cuando visita a su prima Isabel, Lucas 1:13, madre de Juan el Bautista y esposa de Zacarías.
El nombre de la oración está tomado de la primera frase en latín, que reza Magnificat anima mea Dominum. Dentro de la Liturgia de las Horas, el Magnificat es el Canto Evangélico empleado en el rezo de las vísperas.
En aquel tiempo, María dijo: " Proclama mi alma la grandeza del Señor, y se alegra mi espíritu en Dios, mi Salvador; porque ha puesto sus ojos en la humildad de su esclava, y por eso desde ahora todas las generaciones me llamarán bienaventurada, porque el Poderoso ha hecho obras grandes en mí: su nombre es Santo, y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación. Él hizo proezas con su brazo: dispersó a los soberbios de corazón, derribó del trono a los poderosos y enalteció a los humildes, a los hambrientos los colmó de bienes y a los ricos los despidió vacíos. Auxilió a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia-como lo había prometido a nuestros padres-en favor de Abraham y su descendencia por siempre. Lucas, 1, 46-55.

Sea cual sea el origen de este canto, lo que debemos de tener en cuenta es el sentimiento de alabanza a Dios, que transmite este canto en boca de María.

María en este canto, nos manifiesta su creencia en el Dios de la misericordia y no cree en un Dios terrible, amenazante y violento que recogía las antiguas escrituras. Por eso, según el Dios que da sentido a nuestra vida, así son los sentimientos que cada cual alimenta y contagia a los demás.

El problema preocupante, que plantea el Magnificat, está en que nuestro comportamiento en la vida no coincide con el proyecto de Dios. Dios nos plantea un cambio completo a las situaciones sociales. Pero somos nosotros, los que no estamos dispuestos a colaborar y llevar a cabo esos cambios, sino que hacemos todo lo contrario. Por eso lo soberbios, poderosos y ricos siguen en sus tronos, mientras que los humildes y hambrientos aumentan cada día.

Sea lo que sea de la historicidad de estos datos, lo que importa es la lección religiosa que plantea el evangelio de Lucas: cuando Jesús viene a este mundo, el sacerdocio enmudece y no tiene ya nada que decir, mientras que la mujer sencilla del pueblo sin importancia pronuncia el proyecto subversivo de la "misericordia" del Señor: "desbaratar los planes de los arrogantes, derribar del trono a los poderosos, encumbrar a los humildes, colmar de bienes a los hambrientos y despedir a los ricos con las manos vacías" (Lc 1, 50-53).


En este segundo domingo de Adviento, en el que vamos caminado hacia la venida y llegada del Mesías, María como verdadera Madre de la Iglesia, nos llama a descubrir nuevos rasgos de esa Iglesia maternal.

¿Cuáles podrían ser los rasgos de una Iglesia más mariana en nuestros días?.

Una Iglesia del " Magníficat ", que no se complace en los soberbios, potentados y ricos de este mundo, sino que busca pan y dignidad para los pobres y hambrientos de la tierra, sabiendo que Dios está de su parte.


Una Iglesia que fomenta la " ternura maternal " como María. Es decir, una Iglesia de brazos abiertos, que no rechaza a nadie, sino que acoge.

viernes, 6 de diciembre de 2013

LA RELIGIÓN DENTRO DEL MARCO DE LA CONSTITUCIÓN ESPAÑOLA.

La Constitución Española que fue ratificada en referéndum el 6 de diciembre de 1978, en su artículo 16 dice:

1.    Se garantiza la libertad ideológica, religiosa y de culto de los individuos y las comunidades sin más limitación, en sus manifestaciones, que la necesaria para el mantenimiento del orden público protegido por la Ley.

2.    Nadie podrá ser obligado a declarar sobre su ideología, religión o creencias.


3.    Ninguna confesión tendrá carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones.


En estos años he podido comprobar que se ha llevado a cabo una gran transición política en nuestro país, pero no a la vez, desde mi punto de vista, se ha producido la misma transición religiosa.


El hecho es que la sociedad española se ha secularizado a una velocidad de vértigo. Mientras que la jerarquía eclesiástica española, en ese mismo tiempo sea planificado en criterios excesivamente conservadores, lo que ha tenido como consecuencia que en España coinciden en este momento una creciente progresión de nuevas ideas, con una alarmante regresión religiosa. Acontecimiento, que está llevando a un abandono de los mismos católicos de su Iglesia. Y es que la Jerarquía Eclesial, olvida que a medida que vivimos, vamos transformando nuestra forma de pensar. Pero esa nueva forma de pensar, nos llevará a una nueva forma de vivir. Por eso el Concilio Vaticano II nos dejo muy claro: " Para realizar este cometido pesa sobre la Iglesia el deber permanente de escrutar a fondo los signos de los tiempos e interpretarlos a la luz de Evangelio, de forma que, acomodándose a cada generación, pueda la Iglesia responder a los perennes interrogantes humanos sobre el sentido de la vida presente y futura, y sobre la mutua relación entre una y otra. " ( Gaudium et Spes, 4 ).

Posiblemente, si la Iglesia, llevara a cabo esa transición religiosa, no se vería tan perseguida, margina y ofendida. No olvidemos que es la Iglesia la que está en el mundo, y no el mundo en la Iglesia.

Es verdad, que la mayoría de la población española se declara católica, según la última encuesta del CSI, el 70 %; pero también es verdad que solo de ese porcentaje que se declara católico es practicante el 14 %. Por eso, el Estado debe de colaborar con la Iglesia Católica como reconoce la Constitución, pero también reconoce antes que ninguna confesión tendrá carácter estatal. Y nosotros como verdaderos creyentes, somos los que no debemos consentir tener privilegios legales con el Estado, pues estos privilegios llevarán posiblemente a un cierto amarre en nuestra libertad. Nosotros lo que si debemos es ayudar y favorecer a las demás creencias de manifestar su fe, en las misma condiciones que nosotros.


NO SEREMOS MÁS, POR NEGAR OTRAS CONFECCIONES, SINO QUE SERESMOS MÁS POR NUESTRO ESTILO DE VIDA, EN TODOS LOS AMBITOS SOCIALES.