sábado, 31 de julio de 2010

EVANGELIO DOMINGO 1 DE AGOSTO. 18ª SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO

Evangelio según San Lucas 12, 13-21

En aquel tiempo, dijo uno del pueblo a Jesús: " Maestro, dile a mi hermano que reparta conmigo la herencia ". Él le contestó: " Hombre, ¿ quién me ha nombrado juez o árbitro entre vosotros ? " Y dijo a la gente: " Mirad: guardaos de toda clase de codicia. Pues aunque uno ande sobrado, su vida no depende de sus bienes ". Y les propuso una parábola: " un hombre rico tuvo una gran cosecha. Y se dijo: Haré lo siguiente: derribaré los graneros y construiré otros más grandes, y almacenaré allí todo el grano y el resto de mi cosecha. Y entonces me diré a mí mismo: " Hombre, tienes bienes acumulados para muchos años: túmbate, como, bebe, y date buena vida ". Pero Dios le dijo: " Necio, esta noche te van a exigir la vida. Lo que has acumulado ¿ de quién será ? " Así será el que amasa riquezas para sí y no es rico ante Dios ".

COMENTARIO.-

Durante toda la semana he insistido mucho sobre la actualidad del Evangelio, en la vida de hoy. Haciendo destacar, que los Evangelios, antes que unos libros de religión, son los mejores manuales para la convivencia humana. Prueba de ello, es el Evangelio de este domingo.

La crisis económica que estamos sufriendo desde hace dos años, es el claro ejemplo de lo que la parábola del Evangelio nos quiere enseñar. La codicia de unos países ricos, grandes banqueros y poderosos, no solamente en lo económico. También la codicia de muchos en mantener sus cargos políticos, títulos religiosos, o puestos de trabajos no bien desarrollados, es lo que ha desencadenado que millones de trabajadores pierdan su empleo, familias arruinadas y millones de seres humanos vivan en la extrema pobreza.
A todo ello, también hemos contribuido todos nosotros, viviendo por encima de nuestras posibilidades, soñando con acumular cada vez más, olvidándonos de todos los que tenían necesidades. Como dice el refranero, la codicia, rompe el saco y eso es lo que nos ha pasado. "construiré otros más grandes, y almacenaré allí todo el grano y el resto de mi cosecha. Y entonces me diré a mí mismo: " Hombre, tienes bienes acumulados para muchos años: túmbate, como, bebe, y date buena vida ".

Jesús hace intervenir a Dios : " Dios le dijo: " Necio, esta noche te van a exigir la vida. Lo que has acumulado ¿ de quién será ? " Así será el que amasa riquezas para sí y no es rico ante Dios ".

Lo que yo aprendo de este mensaje, es que crear riquezas económicas no es malo, siempre que se creen en beneficioso de todos, y no nos apropiemos de lo ajeno, de cualquier bien ajeno. Crear riquezas económicas no es malo, siempre que nos permitan agrandar los graneros del horizonte de la vida, y del Reino de Dios en la tierra. Crear riquezas económicas no será malo, siempre que estas no nos deshumanicen.

Crear riquezas económicas, políticas y eclesiásticas serán malas, cuando nos olvidemos, de la amistad, la solidaridad, la honradez, del compartir, y de vivir el día a día con los demás, con lo que Dios nos ha dado tanto en lo material como en lo espiritual.

En definitiva, la codicia es la falta de la humanización de Dios en nosotros, es decir, la falta de Jesús en nuestra vida. Ya que la codicia, nos deshumaniza y no nos hace felices, Y al no ser felices, no podemos hacer felices a los demás.

Pasemos por esta vida, haciendo el bien y haciendo felices a los demás, como Jesús lo hizo.

Rafael González Martín. Écija ( Sevilla ). DIFUNDID EL EVANGELIO.

viernes, 30 de julio de 2010

ADMIRADORES O SEGUIDORES

El Evangelio de hoy viernes Mt 13, 54-58, nos dice: " que fue Jesús a su ciudad y se puso a enseñar en la sinagoga. La gente quedaba admirada.......".

La figura de Jesús, no fue solamente admirada por las gentes de su época, sino que ha sido admirada a todo lo largo de la historia. Hoy en día, también sigue siendo admirada, no solamente entre las personas mayores, sino entre las personas de todas las edades y especialmente entre los jóvenes, según revelan varias encuestas de opinión.

La cuestión es saber si Jesús, lo que quiere es admiradores o seguidores. Lógicamente de los Evangelios deducimos que Jesús lo que quiere son seguidores y no admiradores.

La pregunta es obvia: ¿ por qué entre los creyentes existen más admiradores que seguidores ?.

Por que la admiración, se queda en lo maravilloso del personaje, posiblemente en su divinidad y esto no requiere compromiso ninguno con Jesús. El seguimiento requiere un encuentro con lo humano para encontrar lo divino, es decir imitar a Jesús, vivir como Jesús y esto es ir en contra de muchos principios dogmáticos sociales y eclesiales.

Lo que hace más humano y construye el Reino de Dios en este mundo, son las personas que se parecen e intentan vivir como Jesús y no las gentes que sólo lo admiran y veneran.

La Iglesia necesita seguidores y no admiradores.

jueves, 29 de julio de 2010

LA PASION POR EL REINO DE DIOS

Los Evangelios, de los días de esta semana, han estado dedicados a presentarnos el Reino de los Cielos desde el carácter doctrinal del Evangelio de Mateo. Un interés doctrinal que se pone de manifiesto, sobre todo, en los cinco grandes discursos, que jalonan toda la obra, no como cuerpos extraños, sino insertándose en él, conectando secciones narrativas y proporcionando el sentido de la acción.

- El sábado 24 de julio: " El Reino de los Cielos se parece a un hombre que sembró buena semilla en su campo...." Mt 13, 24-30.
- El lunes 26 de julio: " El reino de los Cielos se parece a un grano de mostaza..... " Mt 13, 31-35
- El miércoles 28 de julio: " El Reino de los Cielos se parece a un tesoro escondido en el campo...... " Mt 13, 44-45
- El jueves 29 de julio: " El reino de los Cielos se parece también a la red que echan en el mar... " Mt 13, 47-53.

En este capítulo 13, el discurso en parábolas nos quiere reflejar la naturaleza del Reino de los Cielos. Es importante tener en cuenta que Jesús habla constantemente del Reino de Dios, pero nunca explica directamente en qué consiste.
La causa a la que Jesús dedica su tiempo, sus fuerzas y su vida entera es a lo que Él llama el Reino de Dios. Jesús todo lo que dice y hace está al servicio del Reino de Dios. El Reino de Dios es la clave para captar el sentido que Jesús da a su vida.

Jesús no vino para construir la Iglesia, ni enseñar una doctrina religiosa para que sus oyentes la aprendan bien. Jesús anuncia un acontecimiento para aquellas personas, que lo acogen con gozo y con fe. Una vida más digna para todos, buscando con fuerza que Dios sea acogido entre nosotros y que su reino de justicia y misericordia se vaya extendiendo con alegría.

Nosotros como seguidores de Jesús es la misión que tenemos, el seguir trabajando con gozo, fe y alegría en construir el Reino de los Cielos, no en los cielos, sino en la tierra. El Reino de Dios no es la Iglesia, el Reino de Dios es el mundo y la humanidad. La Iglesia es la comunidad de creyentes en Jesús, que son llamados diariamente a seguir construyendo el Reino.

martes, 27 de julio de 2010

LA PARÁBOLA DE LA CIZAÑA

El otro día, utilizábamos la parábola de la cizaña, para ver la actualidad que el Evangelio tiene. Posiblemente algunos, al leerla tuviera la sensación de no entenderla. Lo mismo le ocurrió a los apóstoles según nos recuerda el evangelio de la liturgia de hoy.

En aquel tiempo, Jesús dejó a la gente y se fue a casa. Los discípulos se le acercaron a decirle: " Acláranos la parábola de la cizaña en el campo ". Él les contestó: " El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre, el campo es el mundo; la buena semilla son los ciudadanos del Reino; la cizaña son los partidarios del Maligno; el enemigo que la siembre es el diablo; la cosecha es el fin del tiempo, y los segadores los ángeles. Lo mismo que se arranca la cizaña y se quema, así será el fin del tiempo: el Hijo del Hombre enviará a sus ángeles, y arrancarán de su Reino a todos los corruptores y malvados y los arrojarán al horno encendido; allí será el llanto y el rechinar de dientes. Entonces los justos brillarán como el sol en el Reino de su Padre. El que tenga oídos, que oiga ".

Vivimos en una sociedad cargada de nuevas formas de ver la vida, de nuevas costumbres y mentalidades, de nuevas creencias religiosas. Circunstancias, que indiscutiblemente con el paso de los tiempos irán influenciando en nuestra forma de pensar. Por eso, una cosa es lógica y evidente, que tenemos que ir acostumbrándonos, a saber convivir con todas clases de gentes, de mentalidades, de creencias, de usos y costumbres. Y esto, nos debe de llevar a respetar a todos, a no juzgar y despreciar a nadie. Nosotros no debemos hacer divisiones, ni establecer premios y condenas entre buenos y malos, eso corresponde exclusivamente a Dios.

Y esto es muy frecuente entre los que formamos parte de una misma creencia religiosa. Estableciendo líneas de cortes entre progresistas y conservadores. Existiendo normalmente por alguna parte, a veces un establecimiento de juicio, condena y desprecio hacia la otra, creyendo que uno es el trigo y el otro es la cizaña. No debemos olvidar, que muchas normas y costumbres fueron fijadas por las formas de pensar de una época. Esas personas, posiblemente actuarían de otra forma en está sociedad, que nos ha tocado vivir a nosotros. Con esto no digo de que se trate de renunciar cada uno a sus convicciones. Sino que aprendiendo de Jesús, la primera convicción que debemos de tener en cuenta es la del respeto y la tolerancia, que nos permitirán unirnos más a todos y por lo tanto unirnos más a Dios.

Todos debemos de tener un sólo camino, el de Jesús en la construcción del Reino de Dios.

lunes, 26 de julio de 2010

HOY DIA DE LOS ABUELOS

Coincidiendo con la festividad de San JoaquÍn y Santa Ana, padres de la Virgen, abuelos de Jesús. Mensajeros de la Paz organiza desde hace doce años " EL DIA DE LOS ABUELOS ".

No quisieras Yo, dejar de pasar este día, sin dedicarle en esta pequeña reflexión diaria que realizó en mi blog, a esas personas que sin quererlo reconocer, han actuado de segundos padres.
Y más en estos tiempos, que por circunstancias de la dinámica social, la pareja conyugal tiene que trabajar ambos. Teniendo los abuelos que cuidar de los nietos, cambiando pañales, dando biberones, llevándolos a la guardería, después al colegio y sufriendo con sus nietos también los supensos del bachiller y de la universidad. Y posiblemente, la reprimenda que nuestra madre, nos propinó un día, por nuestras travesuras.

Abuelos, almohada de consejos de grandes y pequeños. Sabiduría de la universidad de la vida. Experiencia de la historia y de las relaciones personales. Apóstoles de sus tiempos, testigos de Cristo ante sus hijos y nietos.

Aprovechemos esta fuente de vida que son nuestros abuelos, haciendo con ellos, lo que ellos hicieron con nosotros. Cuidemos de nuestros abuelos, de los dependientes en sus necesidades, de los que la vida les permite todavía defenderse, con nuestra compañia.

Abuelos, marco fundamental de referencia de la familia, como centro de amor y seguridad.

Mis oraciones de hoy será para Uds. en gratitud por todo.



FELICIADES TAMBIEN A TODOS LOS JOAQUÍN Y ANA

sábado, 24 de julio de 2010

DOMINGO 25 DE JULIO. FESTIVIDAD DE SANTIAGO APOSTOL. EVANGELIO

DOMINGO 25 DE JULIO. FESTIVIDAD DE SANTIAGO APOSTOL. EVANGELIO.

El Evangelio de la solemnidad de Santiago Apostol.

Evangelio según San Mateo 20, 20-28

En aquel tiempo, se acercó a Jesús la madre de los Zebedeos con sus hijos y se postró para hacerle una petición. Él le preguntó: " ¿ Qué deseas ? " Ella contestó: " Ordena que estos dos hijos míos se sienten en tu Reino, uno a tu derecha y el otro a tu izquierda 2. Pero Jesús replicó: " No sabéis lo que pedís. ¿ Sois capaces de beber el cáliz que yo he de beber ? ". Contestaron : " Lo somos ". Él le dijo: " Mi cáliz lo beberéis, pero el puesto a mi derecha o a mi izquierda no me toca a mí concederlo, es para aquellos para quienes lo tiene reservado mi Padre. Los otros diez, que lo habían oído, se indignaron contra los dos hermanos. Pero Jesús, reuniéndolos, les dijo: " Sabéis que los jefes de los pueblos los tiranizan y que los grandes los oprimen. No será así entre vosotros: el quiera ser grande entre vosotros, que sea vuestro servidor, y el que quiera ser primero entre vosotros, que sea vuestro esclavo. Igual que el Hijo del Hombre no ha venido para que le sirvan, sino para dar su vida en rescate por muchos ".

COMENTARIO.



Pongámonoos en antecedentes. Jesús conoce muy pronto a los hijos de Zebedo, Santiago y Juan en el comienzo de su vida pública, y a su madre Salomé. Mujer que acompaña a Jesús hasta el final.

El texto evangelico, no es nada más que el reflejo de la condición humana. ! Que va a querer una madre para sus hijos !. Lógicamente lo mejor. Por eso pide a Jesús que sus dos hijos se sienten uno a la izquierda y otro a la derecha. Pero no solamente se refleja en el texto la condición maternal, si no la condición plenamente humana de ser los mejores y los primeros, los más importantes. Ya que eso nos gusta a todos, para que negarlo.

El problema está, cuando uno quiere ser el primero, el más grande, el más importante; pero solo para su servicio y sus interéses y el dominio de los demás. Y no ser consciente de que los dones que Dios te ha dado para ser el primero, el más grande y el más importante; es para que tú seas un servidor más en la construcción del Reino de Dios.

Por eso Jesús les dice, que serán capaz de beber su cáliz; pero que si el beber su cáliz no les lleva al compromiso de dar la vida por los demás, no sirve para nada. Por eso será el Padre el que otorgue ese sitío a cada uno, en función del servicio que tengamos a los demás y del compromiso con el Reino de Dios y no por el lugar que ocupemos en la Iglesia o en la sociedad.

El ejemplo de Santiago y de los otros discípulos nos exige a todos nosotros el construir otro tipo de vida eclesial, donde la autoridad se ejerza como servicio y no como privilegio; jerarquía o autoridad, donde seamos capaces de entregar la propia vida por el hermano empobrecido como lo hizo el mismo Jesús que no vino a ser servido sino a servir y a dar la vida en rescate por todos.

Este problema ha estado siempre presente en la Iglesia. Y después del Vaticano II, sigue sin resolver. Y es que los cristianos debemos aceptar la estructura apostólica y jerárquica de la Iglesia universal, como de las Iglesias diocesanas y locales. Teniendo muy claro que, antes que cualquier estructura, está la voluntad de Jesús y por lo tanto la nuestra de reformar la religión, en el momento que está no coincide con su verdadero mensaje, recogido por la tradición de los evangelios.
La jerarquía debe de actuar como referencia de unidad en Cristo y no como referencia de poder y de sumisión del pueblo de Dios.

FELICIDADESA LOS SANTIAGOS

EVANGELIO DOMINGO 25 DE JULIO. 17ª SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO

Os envió el Evangelio que correspondería al Domingo de la 17ª semana del tiempo ordinario. Pero al coincidir este domingo, con la festividad de Santiago Apóstol, será sustituido por el de la solemnidad del Apóstol, Mateo 20, 20-28, ( que intentaré también enviarlo ).

Evangelio según San Lucas, 11, 1-13

Una vez que estaba Jesús orando en cierto lugar, cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo: - Señor, enséñanos a orar, como Juan enseñó a sus discípulos.
Él les dijo: - Cuando oréis, decid: «Padre, santificado sea tu nombre, venga tu reino, danos cada día nuestro pan del mañana, perdónanos nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a todo el que nos debe algo, y no nos dejes caer en la tentación».
Y les dijo: - Si alguno de vosotros tiene un amigo y viene durante la medianoche para decirle: «Amigo, préstame tres panes, pues uno de mis amigos ha venido de viaje y no tengo nada que ofrecerle». Y, desde dentro, el otro le responde: «No me molestes; la puerta está cerrada; mis niños y yo estamos acostados: no puedo levantarme para dártelos». Si el otro insiste llamando, yo os digo que, si no se levanta y se los da por ser amigo suyo, al menos por la importunidad se levantará y le dará cuanto necesite.
Pues así os digo a vosotros: pedid y se os dará, buscad y hallaréis, llamad y se os abrirá; porque quien pide recibe, quien busca halla, y al que llama se le abre.
¿Qué padre entre vosotros, cuando el hijo le pide pan, le dará una piedra?
¿O si le pide un pez, le dará una serpiente? ¿O si le pide un huevo, le dará un escorpión?
Si vosotros, pues, que sois malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo piden?

COMENTARIO.-

Posiblemente uno, de los textos del evangelio, con más profundidad. Y no, por que en el, nos enseñé Jesús la oración universal del cristiano, EL PADRENUESTRO. Si no, por que en este texto, Jesús nos enseña la plena CONFIANZA EN DIOS PADRE.

Jesús nos llama a nosotros, a tener plena confianza en el Padre, igual que Él la tuvo: " Os digo a vosotros: pedid y se os dará, buscad y hallaréis, llamad y se os abrirá ". Por que Jesús sabe muy bien por su experiencia que: " quien pide recibe, quien busca halla, y al que llama se le abre ".

Tres son las actitudes que Jesús nos llama a descubrir, pedir, buscar y llamar. Tres actitudes que la tenemos que experimentar en nosotros mismo en primer lugar, para poderlo experimentar después como Iglesia.

Pedir. Es la actitud del pobre, que necesita aquello que no es capaz de conseguir por si mismo. Esta nuestro corazón en esa actitud ante Dios.
Buscar. Es la actitud del que está perdido. Pero para buscar, tenemos que movernos. Nos movemos en busca de la confianza de Dios.
Llamar. Es la actitud de aquel que se encuentra perdido y busca y pide. Llamamos a gritos a la confianza de Dios.

Esta confianza en Dios, nos remontará, a una nueva experiencia. Pues el que pide recibe. Nos abrimos nosotros a recibir la confianza de Dios. El que busca halla. Hallamos la tranquilidad y la confianza en Dios o en el mundo. Al que llama se le abre. Llamamos a Dios, pero abrimos nuestro corazón a Él.

Aprendida nuestra confianza personal, aprendamos nuestra confianza como Iglesia.

Pedir. Es la actitud de una Iglesia pobre, débil y privada de poder, seguidora de Jesús. Que recibe a todos sus hijos con los brazos abiertos.
Buscar. Es la actitud de una Iglesia, que busca a Jesús en función de los signos de los tiempos. Y que por lo tanto, halla su lugar en el mundo.
Llamar. Es la actitud de una Iglesia, peregrina por el mundo que llama al mensaje de Jesús. Y a la cual, se le abre las puertas de la humanidad.

Que nuestra vida sea contagio de la confianza en Jesús y Dios Padre.

viernes, 23 de julio de 2010

EL EVANGELIO, EL MEJOR MANUAL DE LA MAS HUMANA CONVIVENCIA.

Sin duda alguna los Evangelios son posiblemente uno de los libros de mayor actualidad. El Evangelio, antes que un libro de religión, es el mejor manual de la más humana convivencia. Y prueba de ello, es el mensaje que la parábola de la cizaña, nos presenta el evangelio de mañana sábado.

En aquel tiempo, Jesús propuso ésta otra parábola a la gente: " El Reino de los Cielos se parece a un hombre que sembró buena semilla en su campo; pero, mientras la gente dormía, un enemigo fue y sembró cizaña en medio del trigo y se marchó. Cuando empezaba a verdear y se formaba la espiga, apareció también la cizaña. Entonces fueron los criados a decirle al amo: Señor, ¿ no sembraste buena semilla en tu campo ? ¿ de dónde sale la cizaña ? Él les dijo: " Un enemigo lo ha hecho ". Los criados le preguntaron: " ¿ Quieres que vayamos a arrancarla ?" Pero él les respondió: " No, que podríais arrancar también el trigo. Dejadlos crecer juntos hasta la siega, y cuando llegue la siega diré a los segadores. " Arrancad primero la cizaña y atadla en gavillas para quemarla, y el trigo almacenadlo en mi granero ". ( Mt 13, 24-30 ).

La parábola de la cizaña es la parábola del respeto, de la tolerancia y del pluralismo. Es, por tanto, una parábola de enorme actualidad. Vivimos en una sociedad que cada día es más plural y está cada día más diversificada. Las sociedades avanzadas ya no son ( ni pueden ser ) sociedades homogéneas, uniformes y monolíticas, como lo eran antiguamente. La llamada " aldea global " es un hecho. En esta " aldea ", las comunicaciones y los transportes, la economía y la política, todo está tan interconectado, que ya nunca más será posible vivir en la paz armoniosa en que se vivía en las sociedades antiguas.

Por todo esto, ahora es tan frecuente oír a los que se lamentan de la " secularización ", del " laicismo " y del " relativismo " que imperan por todas partes, dañan la convivencia pacífica, arruinan las buenas costumbres, etc,etc. Para muchas personas religiosas y de mentalidad tradicional, todo eso es la " cizaña actual ". Es decir, en eso está la mala semilla que el enemigo ha sembrado en nuestro terreno. De ahí la cantidad de malas hierbas que crecen por todas partes.

Así las cosas, no es de extrañar que haya tantos " trabajadores del Señor " que, sin duda con buena voluntad, quisieran arrancar cuanto antes tanta mala hierba como crece junto al trigo. Pero, por más sorprendente que parezca, el Señor no quiere que se haga eso. Porque nadie está cualificado para saber dónde está la mala hierba y dónde el buen trigo. Jesús quiere que sus trabajadores sean respetuosos, tolerantes y nunca fanáticos. Porque los humanos nos equivocamos. Y tenemos el peligro de ir por la vida arrancando lo que pensamos que son malas hierbas, cuando en realidad es posible que estemos arrancando el trigo de Dios. Dejemos a Dios que sea Dios. Y, por tanto, que sea Él quien tenga la última palabra.

Esta reflexión nos la realiza el teólogo José Mª Castillo en su libro Seguimiento de Jesucristo.

miércoles, 21 de julio de 2010

¿ SOMOS SEMBRADORES DE LA PALABRA ?

En el Evangelio de hoy, Mateo nos relata la siguiente parábola en la que Jesús dice: " Salió el sembrador a sembrar. Al sembrar, un poco cayó al borde del camino; vinieron los pájaros y se lo comieron. Otro poco cayó en terreno pedregoso, donde apenas tenía tierra; como la tierra no era profunda, brotó enseguida; pero en cuanto salió el sol, se abrasó, y por falta de raíz se secó. Otro poco cayó entre zarzas, que crecieron y lo ahogaron. El resto cayó en tierra buena y dio grano; unos ciento, otros setenta; otros treinta. El que tenga oídos, que oiga ".

En el Evangelio del domingo pasado Maria, la hermana de Lázaro, nos enseñaba la necesidad de escuchar la palabra. En el Evangelio de hoy, Jesús nos recuerda la OBLIGACIÓN que tenemos todos de sembrar la palabra. Sembrar la palabra no es misión sólo de los curas y las monjas; sembrar la palabra es la misión de todos los seguidores de Cristo, como continuadores de la misión del Reino de Dios en la tierra. Como podemos comprobar el próximo viernes en el evangelio, donde Mateo da su explicación de la parábola. Donde en su explicación pone el acento en la responsabilidad del oyente de la Palabra.

Pero; ¿ como debemos de sembrar la palabra para que de fruto ?.

El discurso religioso puede ser maravilloso, pero solo queda en palabra maravillosas, que vinieron los pájaros y se la comieron. El discurso religioso puede ser coherente en el fondo, pero sólo queda en la exposición teológica. El discurso religioso puede ser comprometedor, pero sólo queda la intención de hacer.

El discurso religioso puede dar fruto, en nuestro tiempo, solamente cuando las personas que transmiten la palabra, viven de tal forma y de tal manera, que el mensaje que transmiten. Solamente en la medida en que somos capaces de vivir lo que predicamos, en esa misma medida la palabra que predicamos, se convierte en semilla que puede dar buen fruto.

Existen demasiados sembradores de la Palabra, pero solamente de la palabra, por eso su semilla es estéril. Y el problema está muchas veces en que los sembradores de la semilla y el Evangelio no siempre coinciden.

martes, 20 de julio de 2010

LOS " ERRORES " DEL VATICANO II

Ayer acudía, a una de esas tantas reuniones eclesiales que realizamos. Y como es propio en ellas, se llega a un momento donde los temas a tratar, se desvirtúan por los cerros de Úbeda. Pero fue curioso para mí, el poder comprobar como ciertos sectores eclesiales achacaban los males de la Iglesia al Concilio Vaticano II. Lógicamente, Yo no pude resistir mi intervención.

Días pasados leía un artículo del salesiano D. José Miguel Núñez titulado. LOS " ERRORES " DEL VATICANO II; y que paso a reproducir.

" Y vuelta con la burra al trigo. Hay quien sigue empeñado en achacar al Concilio Vaticano II todos los males que afligen a la Iglesia en este tiempo. No dudan en hablar de errores de un Concilio Ecuménico en el que la Iglesia ha escuchado el viento del Espíritu intentando ser dócil a sus inspiraciones para continuar, en nombre de Jesús, con su misión en el mundo. Poner en causa el Concilio es poner en causa la Iglesia.
Y el colmo del despropósito es pretender que Benedicto XVI se desdiga de estos supuestos errores de un Concilio en el que Joseph Ratzinger participó como perito conciliar y en el que su teología, al servicio de la misma Iglesia, ha respirado en estos casi cincuenta años. Pura estulticia.
Puede que no todos los procesos post-conciliares hayan sido acertados. Se necesita tiempo y perspectivas para la recepción de un Concilio. Pero de ahí a cuestionar y oscurecer un acontecimiento de tal calibre y de tan decisiva importancia para la Iglesia de hoy va un buen trecho. Por otra parte, todos sabemos de los abundantes frutos que ha producido en la Iglesia este acontecimiento del Espíritu. No querer verlos es sólo expresión de una miopía ideológica.
Le oí hace tiempo a un teólogo explicando el proceso conciliar que la diferencia entre un médico que utiliza el bisturí en una operación y el asesino que usa el cuchillo para matar a su víctima es muy sutil. Ambos desgarran e hieren Pero la diferencia está en la intención. El primero quiere salvar, el segundo apuesta por la iniquidad y la muerte.
De igual modo, la diferencia entre quien analiza una situación desde una perspectiva crítica y quien lo hace desde un ángulo ideológico está en la voluntad manipuladora. Querer someter al Concilio Vaticano II a los postulados de quienes, enquistados en sus prejuicios, nunca aceptaron el Concilio es un despropósito. Pretender que sea la lógica reacción después de achacarle todos los males eclesiales de nuestros días es, simplemente, torticero. Atribuir a Benedicto XVI la voluntad de acabar con los “errores” del Concilio es un “error” de estrategia de quienes enarbolan la bandera de un conservadurismo con el que el Papa no comulgaría porque son, ni más ni menos, piedras de molino ". D. Jose Miguel Nuñez Consejero General para Europa Este de la Congregacion Salesiana ).

lunes, 19 de julio de 2010

JESÚS, REVOLUCIONÓ LA RELIGIÓN

A mí comentario del pasado día 15 del presente mes, titulado: " EN LO HUMANO ES DONDE ENCONTRAMOS A DIOS ". He recibido algunos correos a mi email personal - que algunos tenéis -, y lo cual no me importa nada; - aunque recuerdo que podéis hacerlo en el blog directamente y de forma anónima, pinchando al final del artículo donde pone comentario -.
Lógicamente, suelo contestar de forma personal cuando se trata de uno o dos correos. Pero a esté "post" han sido varios, los que al parecer no están de acuerdo con mi escrito. Y lo cuál, me alegra mucho, pues es señal de que todos estamos dispuestos a pesar libremente en lo religioso, al igual que en los demás ámbitos de la vida.

Si hacemos un verdadero análisis de nuestra religión en los días de hoy; podemos observar que se diferencia en su estructura, muy poco con la religión que Jesús aprendió y que luego reformó, y de la cual nació el cristianismo.
En tiempo de Jesús, la religión estaba basada en la Ley y su obligación estricta. La observancia del sábado como fidelidad plena a Dios, que incluso estaba prohibido hasta curar al moribundo. Todo controlado por los sacerdotes y fariseos. Hoy en día, tenemos una religión basada en los dogmas, derecho canónico y costumbres piadosas de rezos en templos lujosos. Y todo bajo el control también de la curia religiosa.

La consecuencia histórica de esta forma religiosa, ha sido, con frecuencia y lo es, la de anteponer las catedrales y templos, los rezos y novenas y vida sacramental de apariencia y obligaciones de derecho divino a las necesidades y sufrimiento de la gente.

Pues bien Jesús revolucionó la religión, la cambió en su raiz misma. Porque puso el centro de la religión, no en " lo sagrado " y sus observancias, sino en " lo humano " y en sus necesidades. Daba de comer al hambriento, de beber al sediento y se preocupaba de curar a los enfermos aunque fuera sábado.
Con Jesús descubrimos un nuevo concepto de Dios, que Dios es amor y no el yugo peasado de las normas, leyes y malas interpretaciones de las escrituras. Porque para Él, el ser humano estaba por encima de todo, fuera creyente o no creyente, judio o griego, esclavo o libre como recoge San Pablo.

Cristo nos enseño, que en esos que sufren y necesitan no sólo lo básico para vivir, sino el amor, la compañia y el calor humano de los demás es donde está Dios.

Por eso a Dios y a Jesús, no lo encontramos en los templos, sino fuera de ellos y en las personas que nos rodean. En definitiva en lo HUMANO.

sábado, 17 de julio de 2010

EVANGELIO DOMINGO 18 DE JULIO. 16ª SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO

Evangelio según San Lucas 10, 38-42

Entró Jesús en una aldea, y una mujer llamada Marta lo recibió en su casa. Ésta tenía una hermana llamada María, que sentada a los pies del Señor, escuchaba su palabra. Y Marta se multiplicaba para dar abasto con el servicio; hasta que paró y dijo: " Señor, ¿ no te importa que mi hermana me haya dejado sola con el servicio ?. Dile que me eche una mano ". Pero el Señor le contestó: " Marta, Marta: andas inquieta y nerviosa con tantas cosas: sólo una es necesaria. María ha escogido la parte mejor, y no se la quitarán ".

COMENTARIO.-

Situémonos un poco. Este acontecimiento sucede en casa de Lázaro, en el camino de Jesús a Jerusalén. Marta y María son las hermanas de Lázaro.

Lo primero que debemos tener en cuenta en este pasaje evangélico, es que los protagonistas de la acción son las dos mujeres Marta Y María. Algo verdaderamente insólito, pues la mujer en tiempos de Jesús no tenía status de igualdad con respecto al hombre. Es decir, la mujer estaba siempre al servicio del hombre. Y eso, es lo que hace Marta, actuar como le habían enseñado, a ser mujer; por eso ella se multiplicaba para dar abasto con el servicio.
María por el contrario, rompe con todos los esquemas de lo que tiene que hacer la mujer y comprende que escuchar al Maestro, también es un gran servicio al Él y a Ella principalmente. Ya que escuchando a Jesús, María podrá seguirlo.
Aunque seguir a Jesús nos llevará a tener que romper a veces las normas y las tradiciones establecidas, como hizo María que se sentó a los pies de Jesús para escucharlo.

Nosotros hoy, posiblemente nos encontramos, en un ritmo de vida tan agitado y tan rápido y llenos de preocupaciones que nos tiene tan absorbido, que nos olvidamos de lo fundamental, como Marta, que es la escucha de la Palabra de Dios, como María. El evangelista, pone aquí también a las dos mujeres, para recordarnos que la Palabra de Dios es para todos y es de todos.
Ya que la Palabra de Dios está hecha para caminar con nosotros todos juntos en comunidad día a día.

Nuestro cristianismo, está convertido en normas, obligaciones religiosas y tradiciones, que posiblemente nos impidan crear un espacio y tiempo para la escucha de la Palabra de Dios. A lo mejor, como María debemos de romper esas normas, obligaciones religiosas y tradiciones para crear ese encuentro de la Palabra de Dios.

DIFUNDID EL EVANGELIO.

viernes, 16 de julio de 2010

MARIA MADRE DE LA IGLESIA. HOY FESTIVIDAD DE NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN.

Hoy festividad de Nuestra Señora del Carmen, Patrona de los pescadores y marineros. Y pensando que nuestra Iglesia nacida del Espíritu de Cristo y continuada en la persona de un pescador como fue el apóstol Pedro. Quisiera hacer unas reflexiones sobre María en la Iglesia de hoy.

Cuando el Concilio Vaticano II, no sin dificultades, hizo el esfuerzo de situar la figura de María no solamente a la luz del misterio de Cristo, sino también y muy particularmente a la luz del misterio de la Iglesia, no hizo otra cosa que volver a la mejor tradición eclesial, cuando María ocupaba ya en la comunidad creyente " el lugar más alto y a la vez más próximo a nosotros " ( LG 54 ). Por eso, cuando presentamos a María como " prototipo de la Iglesia ", no se hace en un sentido pasivo como el que hace una copia. Sino que se hace con un sentido profundamente activo. Por ello, creo que podríamos hoy preguntarnos:

¿ Cuáles podrían ser los rasgos de una Iglesia más mariana en nuestros días ?.

A mí se me ocurren los siguientes:

- Una Iglesia que fomenta la " ternura maternal " como María. Es decir, una Iglesia de brazos abiertos, que no rechaza a nadie, sino que acoge.

- Una Iglesia que como María proclama la grandeza de Dios y su misericordia.

- Una Iglesia que como María se convierte en signo de esperanza por su capacidad de dar y transmitir la vida.

- Una Iglesia humilde como María, siempre a la escucha de su Señor.

- Una Iglesia del " Magníficat ", que no se complace en los soberbios, potentados y ricos de este mundo, sino que busca pan y dignidad para los pobres y hambrientos de la tierra, sabiendo que Dios esta de su parte.

- Una Iglesia atenta al sufrimiento de todo ser humano, que sabe, como María olvidarse de sí misma y " marchar de prisa " para estar cerca del que necesita esta ayudado.


María modelo de fe, modelo de esperanza, modelo de vida con los signos de los tiempos.

FELICIDADES A TODAS LAS CARMENES Y CARMELOS Y ESPECILAMENTE TAMBIÉN A TODA LA FAMILIA CARMELITA.

jueves, 15 de julio de 2010

EN LO HUMANO ES DONDE ENCONTRAMOS A DIOS

Desde el pasado domingo, en que la selección española de futbol se proclamó campeona del mundo. No se deja de elogiar a sus 23 componentes, no solamente por su saber futbolístico, sino también por sus valores humanos y religiosos. Al parecer Jesús Navas viaja siempre con su biblia, Casillas y Sergio Ramos se santiguan antes de entrar al campo, D. Vicente del Bosque es de misa dominical. También toda la prensa ha destacado los valores de esfuerzo, sacrificio, honradez, humildad, sencillez, entrega que esos jovenes han demostrado y que ponen como estandarte de una juventud española.

En el evangelio de la liturgia de ayer, el evangelista Mateo nos recoge la siguiente exclamación de Jesús : " Te doy gracias, Padre, Señor de cielo y tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos, y se las has revelado a la GENTE SENCILLA. Sí, Padre, así te ha parecido mejor. Todo me lo ha entregado mi Padre, y nadie conoce al Hijo más que el Padre, y nadie conoce al Padre más que el Hijo, y aquél a quién el Hijo se lo quiera revelar ".

Que quiero decir con todo esto. Que a Dios lo encontramos en todo lo humano, en lo humano es donde vemos a Dios y conocemos a Dios. Por que Dios se fundió con lo humano, en Jesús. El misterio de la encarnación, antes que la " divinización " del hombre, es la " humanización " de Dios.

Donde se encuentra lo más sencillamente humano, lo mínimamente humano, lo humano en lo que todos los humanos somos iguales, lo humano en lo que sólo hay eso, humanidad, sin saberes ni títulos, ni nada más, ahí es donde se conoce al Dios humanizado, en Jesus. Por eso, de todo esto no se enteran los sabios y entendidos. ( JM CASTILLO ).

En definitiva, que siendo sencillamente humano es como uno se encuentra con Dios. Y somos humanos, en la medida que actuamos y vivimos con Jesús.

martes, 13 de julio de 2010

LOS EVENTOS MEDIÁTICOS DE LA IGLESIA.

Debe ser notable, que Europa se descristianiza y son cada vez menos los seguidores de la Iglesia Católica y esto preocupa en Roma. Pues ya en el Pontificado de Juan Pablo II, fue sorprendente el número de eventos masivos organizados de forma mediática, con el fin de seguir mostrando al mundo que la religión católica está viva, de que el Papa es importante, de que los Obispos tienen una presencia social a tener en cuenta. Concentraciones que se preparan cuidadosamente y en las cuales se invierte una asombrosa cantidad de dinero. Posiblemente con el fin de que el mundo nos vea que seguimos en la cúspide, más que como proceso evangelizador.

Prueba de ello será La Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), que protagonizará Benedicto XVI en Madrid en agosto de 2011, que costará 50 millones de euros. La mitad serán sufragados por las administraciones públicas. Para recaudar la otra mitad, el presidente de la Conferencia Episcopal, Antonio María Rouco Varela, se ha puesto manos a la obra. Ha convencido a 40 de los empresarios más importantes de España para que financien la visita del Papa. A cambio, obtendrán exenciones fiscales del 80% porque el Gobierno ha declarado el evento “de interés especial”.

Creo que deberíamos realizar un profundo análisis sobre como estamos orientando la presencia de la Iglesia en el mundo. El Evangelio no consiste en concentrar a personas en un espectáculo de masa, si no en vivir el Espíritu que se desprende de él. Pues el resultado está después en nuestra vida cotidiana al contemplar como nuestros templos se encuentran cada vez más vacíos.

Necesitamos centrar a la Iglesia con más verdad y fidelidad en la persona de Jesús y en su proyecto del Reino de Dios. Muchas cosas habrá que hacer, pero ninguna más decisiva que esta conversión, la de volver al mensaje de Jesús. Una Iglesia más sencilla, fraterna y buena, humilde y vulnerable, que comparte las preguntas, conflictos, alegrías y desgracias de la gente. Creando nuevas formas y lenguajes de evangelización, basado en el diálogo y en nuevos carismas que nos permitan comunicar la experiencia viva de Jesucristo.

No sé, la verdad, si con estos eventos tan masivos conseguimos construir la Iglesia que nació del mensaje de Jesucristo.

sábado, 10 de julio de 2010

EVANGELIO DOMINGO 11 DE JULIO. 15ª SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO.

Evangelio según San Lucas 10, 25-37

En aquel tiempo, se presentó un letrado y le preguntó a Jesús para ponerlo a prueba: " Maestro, ¿ qué tengo que hacer para heredar la vida eterna ?. Él le dijo: " ¿ Qué está escrito en la ley ?, ¿ qué lees en ella ?" El letrado contestó: " Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas y con todo tu ser. Y al prójimo como a ti mismo ". Él le dijo: " Bien dicho. Haz esto y tendrás la vida ". Pero el letrado, queriendo aparecer como justo, preguntó a Jesús: " ¿ Y quién es mi prójimo ? ". Jesús dijo: " Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó, cayó en manos de unos bandidos, que lo desnudaron, lo molieron a palos y se marcharon, dejándolo medio muerto. Por casualidad, un sacerdote bajaba por aquel camino y, al verlo, dio un rodeo y pasó de largo. Y lo mismo hizo un levita que llegó a aquel sitio: al verlo dio un rodeo y pasó de largo. Pero un samaritano que iba de viaje, llegó a donde estaba él y, al verlo, le dio lástima, se le acercó, le vendó las heridas, echándole aceite y vino y, montándolo en su propia cabalgadura lo llevó a una posada y lo cuidó. Al día siguiente sacó dos denarios y, dándoselos al posadero, le dijo: " Cuida de él y lo que gastes demás yo te lo pagaré a la vuelta ". ¿ Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo del que cayó en manos de los bandidos ?". El letrado contestó: " El que practicó la misericordia con él ". Díjole Jesús: " Anda, haz tú lo mismo ".

COMENTARIO.

A nada más, que reflexionemos un poco en las preocupaciones que Jesús nos presenta en los evangelios. Observamos tres fundamentales, la comida, la salud y la felicidad. A Jesús, lo que le preocupaba de verdad es que la personas tuvieran sus necesidades básicas cubiertas y fueran felices; por que en la medida que una persona es feliz, está encontrando a Dios, pues Dios es nuestra felicidad. Y de esa manera nuestra vida será eterna.

Esa, es la preocupación del letrado, alcanzar la vida eterna. Y lógicamente está, se alcanza con el amor a Dios y al prójimo. Pero claro, ¿ quién es mi prójimo ?. Esa es la pregunta de la persona que sólo piensa en el cumplimiento de la ley, por que según la ley, así actuará. Por eso Jesús expone la parábola del hombre que bajaba de Jerusalén y es apaleado, dejándolo medio muerto. Jesús dice: " Por casualidad, un sacerdote bajaba..."; y lo mismo un levíta. Que nos quiere decir aquí Jesús con esto. Que cuando nuestra religión, no esta centrada en un Dios de Amor, un Dios de Vida, un Dios de Felicidad; si no nada más que en un Dios de culto, un Dios de precepto, un Dios de ley y ordenamientos, eso no lleva al encuentro del ser humano. Jesús lo que intenta decirnos es que el hombre, el ser humano sea creyente o no de nuestra ideas religiosas, está por encima de toda creencia religiosa. Y eso nos lo enseña con la figura del samaritano.

Termina la parábola con la pregunta clave:" ¿ Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo ?. El letrado contestó: " El que practicó la misericordia con él ". Díjole Jesús: " Anda, haz tú lo mismo ".

Después de 2000 años, existen personas apaleadas en las cunetas de la vida, por eso Jesús nos dice hoy a nosotros: " ANDA, HAZ TÚ LO MISMO ".

DIFUNDID EL EVANGELIO.

viernes, 9 de julio de 2010

JESÚS, REFORMÓ LA RELIGIÓN

Nuestra religión, procede de la religión del pueblo de Israel. Este pueblo vivía su religión, como la religión que Dios había revelado al mundo. Dentro de este entorno, nace Jesús. Jesús fue judio, nacido y educado en Israel, y por lo tanto en la religión de Israel. Jesús observa que la religión en la cuál Él es educado, había sufrido ciertas deformaciones a lo largo de los siglos y por causa de sus dirigentes ( sacerdotes, levitas, letrados, fariseos y saduceos ); los cuales se habían afirmado en sus intereses, olvidando al resto del pueblo de Dios. Por eso, sin duda, Jesús pensó que lo más urgente era reformar la religión revelada a su pueblo. Y efectivamente en Jesús, Dios se humanizó y se nos reveló. Y en Jesús se escribió las pautas para la construcción del Reino de Dios.
Qué quiero decir con esto. Qué nuestra religión, es decir, el cristianismo nació de un laico, del mensaje de un laico, Jesús. Pues Jesús, no perteneció a la clase sacerdotal, ni fue sacerdote; según podemos deducir de la lectura de los evangelios. Pues bien, la iglesia naciente de este mensaje de Jesús en la fiesta de pentecostés, se estructuró " apostólicamente ", a partir de los doce apóstoles, cuyos sucesores se vieron en los obispos. Pero estó, no fué institucionalizado por Jesús. La sucesión apóstolica o episcopal es producto de la evolución de la Iglesia hasta el siglo tercero. Consiguiendose con ello, nuevamente una religión de dirigentes sacerdotales.

Conclusión de todo esto. Y es que los cristianos debemos aceptar la estructura apostólica y jerárquica de la Iglesia universal, así como de las Iglesias diocesanas y locales. Pero teniendo muy claro que, antes que cualquier estructura, está la voluntad de Jesús y por lo tanto la nuestra de reformar la religión, en el momento que está no coincide con su verdadero mensaje, recogido por la tradición en los evangelios. Y que la jerarquía debe de actuar como referencia de unidad en Cristo y no como referencia de poder y de sumisión del pueblo de Dios.

Luego, si la renovación de la curia diocesana de Sevilla, es como punto de reforma religiosa y estandarte de unión en Cristo, bien venida sea. Si sólo es renovación de la curia, para conservación de las tradiciones, se confirmará que la reforma de la religión vendrá de los laicos.

domingo, 4 de julio de 2010

" LA IGLESIA CATÓLICA NO ES UNA RELIGIÓN A LA CARTA " dice Monseñor D. Demetrio Fernández, Obispo de Córdoba.‏

El obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, afirma en su carta semanal, con motivo de la celebración el pasado martes de la festividad de San Pedro y San Pablo, que la católica no es "una religión a la carta", como algunos cristianos pretenden, pues, para ser católico, hay que aceptar al Catecismo y al Papa, siendo éstas "dos condiciones innegociables".
En la referida carta, recogida por Europa Press, Fernández, después de señalar que el día de San Pedro y San Pablo "trae a la mente la figura del Sucesor de Pedro, el Papa de Roma", recuerda que "él es principio y fundamento de la unidad de la Iglesia", de tal forma que, "para un discípulo de Cristo, que pertenece a su Iglesia, la referencia al Sucesor de Pedro es fundamental en su fe católica".
En este sentido, Fernández alude a como, "en el paso que muchos anglicanos están dando para su plena adhesión a la Iglesia Católica, se les exigen dos condiciones imprescindibles: la aceptación de la fe católica íntegramente, tal como está expresada en el Catecismo de la Iglesia Católica y la aceptación del primado del Sucesor de Pedro y la plena comunión con su magisterio y su disciplina".
En consecuencia, para poseer la "condición de católicos, estas dos condiciones son innegociables, y uno deja de ser católico si no acepta alguna de estas condiciones, el Catecismo y el Papa". Sin embargo, el obispo subrayó que "a veces se encuentra uno con cristianos que diseñan ellos mismos la religión que quieren, tomando lo que les gusta y no aceptando lo que les disgusta".
"Se constituyen ellos mismos --prosiguió-- en norma de su vida. Prefieren una religión a la carta, en lugar de acoger la salvación que les viene dada. Algunos incluso se permiten el lujo de despreciar la doctrina de la Iglesia o de no atenerse a esa disciplina".
Por último, Fernández se refiere en su carta a que "la fiesta de san Pedro es una buena ocasión para revisar nuestra relación con el Papa. ¿Es para nosotros una figura decorativa simplemente?. O ¿es un punto de referencia fundamental para nuestra fe?. Con motivo de esta fiesta, hacemos también una colecta para poner esos donativos fruto de nuestra caridad a disposición de la caridad del Papa".
En relación con dicha colecta, el obispo de Córdoba pidió a los católicos que sean "generosos", ya que, "desde la atalaya desde la que el Papa mira a la Iglesia universal y a toda la familia humana, se presentan muchas necesidades a la caridad del Papa. Si él recibe de la solidaridad cristiana de todos los católicos un apoyo traducido en euros, podrá atender a muchas más necesidades entre todas las que se presentan. Con un poco de cada uno, fruto de nuestra caridad, el Papa puede hacer muchísimo en tantos lugares del mundo". RELIGION DIGITAL. COM
(Rd/Ep).


MI OPINIÓN

El Sr. Obispo de Córdoba D. Demetrio Fernández, no deja de sorprendernos con sus frases lapidarias: "la Iglesia católica no es una religión a la carta".
Efectivamente Sr. Obispo. Tendríamos que preguntarnos; ¿ a la carta de quién ?. A la carta del Pueblo de Dios o a la Carta de la Jerarquía Eclesiástica. A la carta del Evangelio de Cristo o a la Carta del Catecismo y de los pensamientos de los Obispos.

Quisiera comentarle al Sr. Obispo, en relación a su escrito lo siguiente. A nada más que, demos un breve repaso de los Evangelios, podemos observar, que Jesús nunca habló de la Iglesia y mucho menos de su organización y jerarquía. Lo más que podemos decir es que, al anunciar el Reino de Dios, " puso el comienzo " de lo que después de Pentecostés empezó a ser la Iglesia ( Conc. Vat II: LG 5 ).

Es verdad, que Pedro tuvo un puesto más destacado entre los apóstoles y en la comunidad primitiva de Jerusalén. Este puesto, con el paso de los tiempos fue ocupado por el Obispo de Roma, llegando a ocupar el puesto más relevante de la Iglesia universal, - el Papado -. El cual, es lógico como fuente de unidad de todas las Iglesias locales, pero no como concentración de poder pleno organizativo de la Iglesia. Y la prueba la hemos tenido últimamente en las Iglesias de España, con los recientes nombramientos episcopales, los cuales han dado lugar a una serie de reacciones y protestas dentro del Pueblo de Dios. Entre los cuales se encuentra el suyo. Un Obispo que no nace en la Iglesia Local, que no se ha formado en esa Iglesia Local y que esa Iglesia Local, no ha tenido ni la oportunidad de opinar sobre su nombramiento. Si no que es mandado como un funcionario de un sitio a otro. Puede ser esto una Iglesia a la carta de la curia romana o una Iglesia a la carta de la diocesis de Córdoba.

Por eso recordando la mejor tradición de la Iglesia, de los Santos Padres y del magisterio pontificio, ellos nos deberían hacernos pensar para el futuro. Pues, yo creo que los futuros nombramientos de Obispos, estarán cada vez más llamados a la elección por su comunidad. El Papa San Celestino I dijo: < Nadie sea dado como obispo a quienes no lo quieran >. El Papa San León dijo: < El que ha de estar al frente de todos debe ser elegido por todos > ( Cuaderno 166 de CiJ ). Juan Pablo II pidió, repetidas veces, a los Obispos y teólogos de todo el mundo, que colaborasen en la búsqueda de formas de ejercer el " ministerio de Pedro " que sean más coherentes con lo que Dios quiere para su Iglesia y también para hacer viable el diálogo entre cristianos y con otras religiones.

No se las dificultades que llevaría hoy en día la vuelta a la práctica de la Iglesia primitiva; creo que las mismas dificultades por la que pasaron en las diversas formas de elección. Lo cierto es, que si queremos seguidores de Jesús en la Iglesia Católica, esta deberá ser una Iglesia más cercana y abierta a sus feligreses y presidida por miembros realizados en la comunidad. El cual, no será valorado por su conocimiento, sino por su seguimiento en Jesucristo.

En cuanto al termino Católico, el Sr. Obispo lo debería interpretar desde la obligación que tenemos todos los creyentes en Cristo de hacer su mensaje universal del Reino de Dios iniciado por Jesús en la unidad del Papa como fuente de unidad de todas la Iglesias, pero no como concentración de poder pleno organizativo de ella.

En cuanto al catecismo, solo le digo, que el único catecismo es el EVANGELIO.

Sr. Obispo, que la solemnidad de los apóstoles Pedro y Pablo, en los próximos años nos hagan reflexionar con amor en la Iglesia, pues en ella hemos recibido el mensaje más grande de salvación y la cual nos acoge en al maduración de nuestra fe.

sábado, 3 de julio de 2010

EVANGELIO DEL DOMINGO 4 DE JULIO. SEMANA CATORCE DEL TIEMPO ORDINARIO

Evangelio según San Lucas 10, 1-12, 17-20.

En aquel tiempo, designó el Señor otros setenta y dos, y los mandó por delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares adonde pensaba ir él. Y les decía: " La mies es abundante y los obreros pocos; rogad, pues, al dueño de la mies que mande obreros a su mies. ¡ Poneos en camino!. Mirad que os mando como corderos en medio de lobos. No llevéis talega, ni alforja, ni sandalias; y no os detengáis a saludar a nadie por el camino. Cuando entréis en una casa, decid primero: " Paz a esta casa ". Y si allí hay gente de paz, descansará sobre ellos vuestra paz; si no volverá a vosotros. Quedaos en la misma casa, comed y bebed de lo que tengan: porque el obrero merece su salario. No andéis cambiando de casa. Si entráis en un pueblo y os reciben bien, comed lo que os pronagn, curad a los enfermos que hay, y decid: " está cerca de vosotros el Reino de Dios ".

COMENTARIO.-

Este texto evangélico, ha sido presentado muchas veces, como el fomento de la vocación presbiteral exclusivamente, ." La mies es abundante y los obreros pocos; rogad, pues, al dueño de la mies que mande obreros a su mies ". Y, no como la vocación universal de los seguidores de Jesucristo.

Hace dos domingos el evangelio nos recordó como Jesús era consciente, de que el sólo no podría construir el Reino de Dios, de que el Reino se debe de construir moviendo pequeñas comunidades y no grandes masas. Pero, Jesús como buen amigo, les advierte, que la construcción del Reino, les llevará enfrentamientos y padecimientos con ciertos sectores de la sociedad. En el evangelio de la semana pasada, Jesús nos daba las claves para su seguimiento. Pues bien, una vez consciente de la misión por nuestra parte, Jesús nos envía hoy a predicar el evangelio.

El evangelio comienza diciendo que " Jesús designó a otros setenta y dos, y los mandó de dos en dos a todos los pueblo y lugares adonde pensaba ir él ".
El número setenta y dos, quiere decir, que ya no son sólo los apóstoles los encargados de continuar las misión, sino que ya existen más comprometidos con Jesús y con el Reino. Es decir, la misión y el encargo de construir el Reino de Dios, es lo que recibe todos los discípulos de Jesús. Hay quienes piensan que la misión de enseñar el Evangelio es sólo responsabilidad de los sacerdotes y clérigos; al igual que muchos sacerdotes y clérigos se creen que solamente ellos son los que pueden hacer una interpretación correcta de los Evangelios. No. Cada uno desde su trabajo, su casa, su barrio, su parroquia y sobre todo su forma de vivir, esta obligado a enseñar el Evangelio.

" No llevéis talega, ni alforja, ni sandalias ". Cuidado, con acomodarnos, tenemos que ponernos en camino diariamente, sin replegarnos en nuestros intereses, nuestro pasado, nuestras prácticas doctrinales y tradiciones, que nos pueden dejar sin llegar a la próxima casa para decir: " Paz a esta casa ".

" Paz a esta casa ". El mensaje de Jesús, no se debe realizar desde la imposición y la obligación, sino desde la comprensión y la fraternidad. El mensaje de Jesús brota cuando contagiamos paz y humanidad, " curad a los enfermos que haya, y decid: " está cerca de vosotros el Reino de Dios ".

Si todas las semanas, termino diciendo: DIFUNDID EL EVANGELIO ", hoy con más razón que nunca. Por eso, contribuye tú a ello y envia hoy el Evangelio a todos tus contactos.

Enseñemos el Evangelio con nuestras palabras, pero especialmente con nuestra forma de vivir.

HOY FESTIVIDAD DE SAN TOMÁS APÓSTOL

El Evangelio de Juan 20,24-29, que corresponde a la liturgia del día nos narra: " Tomás, uno de los Doce, llamado el Mellizo, no estaba con ellos cuando vino Jesús. Y los otros discípulos le decían: " Hemos visto al Señor ". Pero él les contestó: " Si no veo en sus manos la señal de los clavos, si no meto el dedo en el aujero de los clavos y no meto la mano en su costado, no lo creo ". A los ocho días, estaban otra vez dentro los discípulos y Tomás con ellos. Llegó Jesús, estando cerradas las puertas, se puso en medio y dijo: " Trae tu dedo, aquí tienes mis manos; trae tu mano y métela en mi costado; y seas incrédulo, sino creyente ". Contestó Tomás: " Señor mío y Dios mío ". Jesús le dijo: " ¿ Porque me has visto has creído ? Dichosos los que crean sin haber visto ".

Por el oído entran las "verdades". Por los ojos y el tacto, vemos y palpamos los "hechos". Para Tomás y para el común de los mortales, tienen más credibilidad los hechos que vemos y palpamos, que las verdades que oímos. La desgracia es que, con frecuencia, la Iglesia y los cristianos le predicamos a la gente muchas teorías, que pueden ser verdades que a nosotros nos parecen absolutas, pero que a los ciudadanos no le convencen. El día que podamos enseñar nuestras manos, marcadas por el trabajo ( como hizo Pablo: Hech 20,34 )o por el sufrimiento ( como hizo Jesús: Jn 20,27 ), ese día la gente de buena voluntad reconocerá en Jesús a su Señor y a su Dios.

Tomás pidió palpar las llagas. No se conformó con tocar las manos. En el Resucitado, Tomás seguía teniendo presente al Crucificado. Porque, para aquellos hombres, la gran dificultad para creer en la resurrección era precisamente la cruz y las llagas que dejó la cruz. Y es que, en aquella cultura, un crucificado tenía que ser un "maldito". Lo que representaba la mayor dificultad para ver en Jesús la presencia de Dios. Y la plenitud de la Vida, que es Dios.

La dificultad de Tomás es nuestra dificultad. Y la solución tiene que estar donde la encontró Tomás. Cuando en las llagas del dolor y el fracaso, que son las cosas más duras de la condición humana, ahí vemos y palpamos al Resucitado y, en Él, a Dios, entonces es cuando damos el paso decisivo de la fe. Porque entonces es cuando encontramos a Dios en lo humano, en lo más humano, incluso en lo más duro y negativo de la condición humana. Encontrar a Dios en unas llagas es encontrar a Dios en lo más humano. Entonces, la confesión de fe no es un problema, sino una indecible felicidad.

La religión de Jesús. J.M.Castillo

viernes, 2 de julio de 2010

LA OBLIGACIÓN DEL DOMINGO

En el último semanario diocesano del 27 de junio de Iglesia de Sevilla, nos encontramos un artículo bajo el título " LA OBLIGACIÓN DEL DOMINGO ", en él se nos recoge las siguientes enseñanzas del Catecismo de la Iglesia Católica:

" El mandamiento de la Iglesia determina y precisa la ley del Señor: " El domingo y las demás fiestas de precepto los fieles tienen obligación de participar en la misa " ( CIC can.1247 ). " Cumple el precepto de participar en la misa quien asiste a ella, dondequiera que se celebre en un rito católico, tanto el día de la fiesta como el día anterior por la tarde " ( CIC can.1248, ..).
La Eucaristía del domingo fundamenta y confirma toda la práctica cristiana. Por eso los fieles están obligados a participar en la Eucaristía los días de precepto, a no ser que estén excusados por una razón seria ( por ejmeplo, enfermedad, el cuidado de niños pequeños ) o dispensados por su pastor propio ( cf. CIC can. 1245 ). Los que deliberadamente faltan a esta obligación cometen un pecado grave ".
La participación en al celebración común de la Eucaristía dominical es un testimonio de pertenencia y de fidelidad a Cristo y a su Iglesia. Los fieles proclaman así su comunión en la fe y la caridad. Testimonian a la vez la santidad de Dios y su esperanza de la salvación. Se reconfortan mutuamente, guiados por el Espíritu Santo.
" Cuando falta el ministro sagrado u otra causa grave hace imposible la participación en la celebración eucarística, se recomienda vivamente que los fieles participen en la liturgia de la palabra, si ésta se celebra en al iglesia parroquial o en otro lugar sagrado conforme a los prescrito por el Obispo diocesano, o permanezcan en oración durante un tiempo conveniente, solos o en familia,o, si es oportuno, en grupos de familias " ( CIC can. 1248,..2).
Catecismo de la Iglesia Católica nº 2180-2183.


La primera conclusión que yo saco de está información, es que todo aquello que se obliga y se amenza con pecado grave, no sirve para nada. Pues, ¿ Qué sentido tiene que tú vayas obligado a un encuentro fraternal ?. ¿ Qué sentido tiene ir obligados todos los domingos del año y comulgar al menos uno en el año ?. No sería mejor decir: " LA NECESIDAD DEL ENCUENTRO DEL DOMINGO "

Posiblemente hemos perdido la vivencia sacramental, motivada por la expedición de los sacramentos como un billete de lotería, previo pago del servicio religioso, y no como un encuentro vivenciar de nuestra fe. Además de crear la conciencia de una obligación, bajo la culpa del pecado en lugar de un encuentro voluntario y comprometido.

Para celebrar la eucaristía dominical no basta con seguir las normas prescritas o pronunciar las palabras obligadas. No basta tampoco cantar, santiguarse o darnos la paz en el momento adecuado. Es muy fácil asistir a misa y no celebrar nada en el corazón; oír las lecturas correspondientes y no escuchar la voz de Dios; comulgar piadosamente sin comulgar con Cristo; darnos la paz sin reconciliarnos con nadie.
¿Cómo vivir la misa del domingo como una experiencia que renueve y fortalezca nuestra fe? Para empezar, es necesario escuchar desde dentro con atención y alegría la Palabra de Dios y, en concreto, el evangelio de Jesús. Durante la semana hemos visto la televisión, hemos escuchado la radio y hemos leído la prensa. Vivimos aturdidos por toda clase de mensajes, voces, ruidos, noticias, información y publicidad. Necesitamos escuchar otra voz diferente que nos cure por dentro.
Es un respiro escuchar las palabras directas y sencillas de Jesús. Traen verdad a nuestra vida. Nos liberan de engaños, miedos y egoísmos que nos hacen daño. Nos enseñan a vivir con más sencillez y dignidad, con más sentido y esperanza. Es una suerte hacer el recorrido de la vida guiados cada domingo por la luz del evangelio.
La plegaria eucarística constituye el momento central. No nos podemos distraer. «Levantamos el corazón» para dar gracias a Dios. Es bueno, es justo y necesario agradecer a Dios por la vida, por la creación entera, por el regalo que es Jesucristo. La vida no es sólo trabajo, esfuerzo y agitación. Es también celebración, acción de gracias y alabanza a Dios. Es un respiro reunirnos cada domingo para sentir la vida como regalo y dar gracias al Creador.
La comunión con Cristo es decisiva. Es el momento de acoger a Jesús en nuestra vida para experimentarlo en nosotros, para identificarnos con él y para dejarnos trabajar, consolar y fortalecer por su Espíritu.
Todo esto no lo vivimos encerrados en nuestro pequeño mundo. Cantamos juntos el Padrenuestro sintiéndonos hermanos de todos. Le pedimos que a nadie le falte el pan ni el perdón. Nos damos la paz y la buscamos para todos. ( J.A. Pagola ).

Lógicamente esto me lleva a preguntarme:

- ¿ Es la liturgia que venimos repitiendo desde siglos la que mejor puede ayudar en estos tiempos a los creyentes a vivir lo que vivó Jesús, y recapitular para que vivó y murió ?

- ¿ Estamos seguros de estar haciendo hoy bien lo que Jesús quiso que hiciéramos en memoria suya ?


La segunda conclusión, es que existe una gran preocupación, por no decir algo alarmante ante la escases de creyentes en las misas dominicales y aún más en estos tiempos estivales donde se nota algo más la poca asistencia de los fieles.

Posiblemente, creemos que recordando la obligación de ir los domingos a misa, vamos a tener más llenos los templos; por que eso, si es lo que interesa, las apariencias, las masas, el parecer que somos muchos. Miren Uds., nuestros templos se encuentran vacios, posiblemente por que nuestros templos no son ya hoy, el lugar de encuentro con Dios y los hermanos. Posiblemente por que en esos templos no existen encuentros humanos, ya que hemos convertido nuestros templos en el punto de encuentro sacramental obligatorio de los domingos y no en el punto de encuentro y acogida de todos los hijos de Dios. Es decir, el lugar de encuentro con Dios no es un espacio geográfico ( el templo ), sino el espacio humano que se crea del encuentro entre las personas. Donde los humanos nos encontramos, nos comunicamos, convivimos y nos unimos, ahí es donde se encuentra Dios, " Donde dos o más están reunidos en mi nombre ahí estoy Yo ".
Pero si en nuestros templos no existe esa relación humana, no existe una comunidad, es posible que no encontremos a Dios y se busque en otro lado. Por eso seria importante plantarse, muy bien: " LA PARROQUIA COMO LA CASA DE LA FAMILIA CRISTIANA ", no solo como el lugar donde celebramos nuestra fe, sino el lugar abierto al diálogo, al estudio, a la reflexión, a la comunicación, a la ayuda....

jueves, 1 de julio de 2010

URGE UNA PRESENCIA VALIENTE Y SIN COMPLEJOS DE LOS SEGLARES CATÓLICOS EN LA VIDA PÚBLICA

El obispo de Jaén, D.Ramón del Hoyo, insta a los fieles católicos a "intervenir de forma activa en opciones políticas y legislativas que contradicen los valores fundamentales y principios antropológicos y éticos arraigados en la naturaleza del ser humano" con el objetivo de evitar que leyes que integren esas ideas puedan introducirse en el ordenamiento público. Así lo destaca en el artículo 'Urge una presencia valiente y sin complejos de los seglares católicos en la vida pública', que se incluye en el último número de la revista 'Iglesia en Jaén', y que transcribo a continuacion.

URGE UNA PRESENCIA VALIENTE Y SIN COMPLEJOS DE LOS SEGLARES CATÓLICOS EN LA VIDA PÚBLICA.

«El Espíritu acude en nuestra flaqueza: porque no sabemos lo que debemos pedir como conviene; pero el mismo Espíritu intercede por nosotros con gemidos inefables.» (Rom 26). Estas palabras que San Pablo escribe desde Éfeso, en el año 57- 58 a la comunidad cristiana establecida ya en Roma por entonces, nos las propone hoy a nosotros. Aquella efusión del Espíritu Santo sobre la comunidad apostólica reunida en el cenáculo de Jerusalén, congregada y presidida por María la Madre de Jesús, no se ha agotado, ni mucho menos.

La acción del Espíritu es siempre nueva y constante para llevar adelante la misión encomendada por Jesucristo al nuevo pueblo de Dios, su Iglesia, hasta los últimos confines de la tierra.

Debemos recogernos y escuchar el mandato misionero de Jesús: «Id al mundo y predicad mi evangelio» para abrir nuestro interior a la fuerza

del Espíritu y asumir, renovar, llenos de esperanza, la misión profética que el Señor, por su Iglesia, pone en nuestras manos para afianzar y dilatar su Reino. Tenemos que escuchar la voz del Espíritu y caminar luego juntos bajo sus orientaciones.

Puedo decirles que a la vista de la realidad de nuestra Iglesia diocesana y las demandas que recibo, queremos reflexionar dentro del Plan Pastoral para el próximo curso, sobre el laicado en sus múltiples facetas, sobre todo en favor de su formación, colaboración y misión desde los más pequeños hasta los ancianos.

Recientemente celebraba una convivencia retiro con mis hermanos sacerdotes del Arciprestazgo de Linares, al finalizar la Visita Pastoral a las catorce parroquias. En el análisis que hicimos, en clima de oración, veíamos la riqueza y despertar progresivo de un laicado cada vez más comprometido,bien dispuestos, generosos, sencillos, pero necesitados de ánimos y de formación. Se implican en la liturgia, catequesis, atención a los enfermos, en las cáritas parroquiales. Son personas preocupadas ante la realidad tan secularizada que nos rodea, pro la falta de respuesta delas familias, de los jóvenes. Saben y quieren ser luz y sal, y se preguntan cómo hacerlo juntos.

Una realidad evidente es la urgencia y verdadera necesidad de una presencia valiente, confesante y sin complejos de los seglares católicos en la vida pública, y no sólo en las organizaciones parroquiales. El Señor nos pide no encenderla luz debajo del celemín, sino ponerla sobre el candelero para que alumbre a nuestro alrededor.

La levadura del Evangelio debe penetrar en el mundo de la cultura y del arte, en el mundo universitario, en la acción política, en el mundo de la economía, del trabajo, del ocio, de los medios de comunicación social… para orientar las realidades temporales según el corazón de Dios. Cristo vino para salvar al hombre, a toda la humanidad, en todos los tiempos y circunstancias.

Por eso el cristianismo y la Iglesia, desde el inicio de aquel primer Pentecostés, han tenido una dimensión y un alcance públicos. Es cierto que no corresponde a la Iglesia, como tal, actuar en el ámbito político para construir una sociedad justa, pero sí corresponde este papel y es urgente a los fieles cristianos laicos que actúan como ciudadanos bajo su propia responsabilidad. Se trata de una tarea urgente y son estos fieles los que deben afrontar, con el mismo interés que colaboran en las tareas internas de la comunidad en favor de culto, evangelización y caridad, intervenir también de forma activa en opciones políticas y legislativas que contradicen los valores fundamentales y principios antropológicos y éticos arraigados en la naturaleza del ser humano, en particular con respecto al apoyo a la maternidad, defensa de la vida humana, promoción de la familia fundada en el matrimonio, libertad religiosa… para evitar que se introduzcan en el ordenamiento público y en la sociedad leyes y normas, corrientes de opinión que oscurecen y atacan frontalmente la verdad, natural y revelada por Dios.

Este testimonio abierto y valiente de los fieles laicos necesita de apoyo sobrenatural, sobre todo, que contamos con él, pero asimismo de formación y de reconocimiento por la comunidad cristiana. Ciertamente este compromiso y testimonio forman parte del «sí» que, como discípulos de Cristo, animados por su Espíritu, hemos de proclamar hoy a todos nuestros hermanos, como lo hizo San Pedro en el primer Pentecostés.

Monseñor Ramón del Hoyo López. Obispo de Jaén.

En las siguientes semanas hablaremos de todo esto.